En medio Mercosur, de San Pablo a Buenos Aires, esquiadores y aficionados ya empezaron a palpitar la temporada invernal. Mientras en el sur argentino caen las primeras nevadas, los centros de esquí se preparan con todo para esta pasión que convoca a más de 100.000 personas por año.
NIEVE PAULISTA. A 1200 metros sobre el nivel del mar y a 55 kilómetros de San Pablo, en la localidad de San Roque, se encuentra el Ski Mountain Park, un predio de 32 hectáreas, el único centro artificial de esquí y snowboard en Latinoamérica. Su pista de nieve artificial permite a los brasileños soñar -aunque sea por un rato- con los fantásticos paisajes de montaña argentinos. Además, cuenta con una aerosilla que recorre 400 metros hasta alcanzar la cima de un morro.
Este fue el lugar elegido por la Secretaría de Turismo de la Nación para organizar, por segundo año consecutivo, una exposición con lo mejor de nuestro esquí. Operadores de turismo, representantes de los ocho centros más importantes de la Argentina y el público paulista, todos en un mismo lugar seducidos por un único motivo: nieve made in los Andes.
"Cada año visitan nuestros centros de esquí 25.000 brasileños. Nuestro objetivo concreto es
llegar a los 100.000 turistas", comentó Hernán Lombardi, secretario
de Turismo de la Nación y artífice del evento.
Los mejores instructores argentinos y los campeones del esquí y snowboard brasileños hicieron demostraciones y el público disfrutó jugando en la nieve, casi tan linda como la de verdad. Hubo diversión para todos los gustos. "Muito bom", fue el comentario unánime de los que se acercaron al stand de Las Leñas para degustar el mejor vino mendocino.
Y para demostrar que el talento en los deportes de invierno no es exclusivo de los argentinos, los deportistas locales aceptaron el desafío. "Lo nuestro por la nieve es pasión. Practicamos en Aspen, Argentina o Chile", cuenta entusiasmada entre salto y salto la tricampeona brasileña de snowboard freestyle Juliana Veiga, una de las más aplaudidas por la platea.
NIEVE PORTEÑA. El martes 29 por la noche el show de la nieve tuvo lugar en el Divino Buenos Ayres. Allí, el gobierno de la provincia de Tierra del Fuego lanzó oficialmente su temporada invernal. Este año la apuesta más fuerte es el centro de esquí Cerro Castor, a 26 kilómetros de Ushuaia. Inaugurado hace tres años (sus instalaciones son las más modernas del país), ofrece la oportunidad única de esquiar en el fin del mundo.
La megafiesta empezó a las ocho de la noche, con una degustación de platos típicos -centolla y cordero- y una ceremonia ritual indígena. Mauricio Macri, Adriana Brodsky, Juan Ponce de León y Paula Trápani fueron algunos de los vip que se declararon amantes de las bellezas de la provincia. La noche subió en ritmo con los Auténticos Decadentes, Los Calzones Rotos y Las Sabrosas Zarigüeyas. Y, después, el final de la fiesta blanca: láser y nieve para todo el mundo.
María Noel Alvarez
fotos: Diego Soldini
(enviados especiales a Brasil)
en Buenos Aires: Cora Debarbieri
fotos: Maximiliano Vernazza
La Argentina presente para ofrecer lo mejor del turismo en el mercado brasileño.
Bajo una nevada artificial, ardió la pista del Divino Buenos Ayres.
Carlos Manfredotti, gobernador de Tierra del Fuego, y su esposa, Nélida, saludan a Mauricio Macri.
