Exclusivo GENTE. My lejos de Sebastián Yatra, la protagonista de nuestra portada agradece haber "tenido el tiempo necesario para enfrentar y atravesar un duelo como se debe". Y en pleno lanzamiento de "Ella dice", su último corte, revela la intimidad de un largo proceso.
Quince meses de velocímetro al top la llevaron por cuarenta y ocho escenarios en dos continentes y, de paso, batió un récord nacional siendo la artista femenina con ocho presentaciones en el Luna Park. Tini (23) vivió en rush, aprendió a saludar a multitudes en seis idiomas y a dormir en aviones. A punto de despedirse del Quiero volver Tour, en el Movistar Arena que ella misma inauguró, la pandemia resultó una violenta frenada.
En diálogo íntimo con GENTE para la gran portada de esta semana, Tini confirmó que ha sabido capitalizar el 2020 que, para muchos, ya es un año perdido. "Como todo en la vida, las dos miradas son muy posibles y respetables. Pero creo que de todo esto tan terrible que estamos viviendo algo positivo siempre queda. En mi caso particular ya no recordaba cómo era estar tanto tiempo en casa, con mi familia reunida", dijo.
"Revaloricé lo más simple. De repente terminamos de almorzar y no tengo que salir volando a ningún lado. Me sorprendo pensando: ´ey, hay tiempo de sobremesa, de charla, de debate´. Hay un regreso a lo cotidiano y me hace feliz. Realmente siento que este confinamiento me sirvió para madurar personalmente. Atravesé todas y las más diversas emociones sin horarios de vuelo ni la prisa de algún show. Ya no hubo necesidad de tapar con actividades esos momentos en los que sentís que explotás. No me quedó otra que procesar lo que me pasa de un modo distinto, honesto, sin ruidos. Y me hizo crecer", contó.
Claro que, como a muchos, el confinamiento la puso cara a cara con ella misma. Y en ese proceso personal de "atravesar emociones", Tini también se refiere a "la ruptura de mi pareja, por ejemplo". Y a sí lo explica. "En otra ocasión, yendo de un lado al otro entre shows y aeropuertos, no hubiese podido parar para hacer el duelo. Lo hubiese tapado con el ritmo del ir y venir, las obligaciones, los shows… Y después te encontrás llorando por ahí, de a ratos angustiada, por momentos triste... Porque eso pasa cuando no tenés el tiempo necesario y oportuno para conectarte con vos misma. En cambio, en este caso, enfrenté al duelo, lo atravesé como se debe. Y agradezco que haya sido así, cerca de mi familia y de mis amigas, llamándome todos los días. Fue otra situación en la que me encontré distinta".
"Y por otro lado, estamos sensibles. Y estando encerrados, todo lo que vemos del mundo en los medios se magnifica. Los problemas que escuchamos nos hacen cuestionarnos como sociedad y como personas. Vamos redefiniéndonos", reflexionó. ¿Y cómo se redifinió? Así lo expresa: "Siento que hay una mujer muy grande en este cuerpo. Desde los trece años vivo situaciones muy locas, y en este contexto me siento más “encontrada” que nunca. Mejor parada. Más segura. Siempre fui una chica muy emocional, subo, bajo, vuelvo a subir…. Pero creo que finalmente encontré la estabilidad emocional, algo muy difícil para cualquiera. Hoy estoy tranquila, en paz"
Y respecto de qué pasó realmente con el colombiano Sebastián Yatra (25), Tini dijo: "Jamás voy a revelar qué fue lo que pasó entre nosotros. Es algo recontra íntimo. Pero era lo mejor para los dos, y es importante aclararlo. Cuando dos personas se quieren, una separación no es algo feliz. Pero voy a quedarme con los recuerdos más lindos de todo lo que tuvimos".
Continuó: "Fue una historia de amor increíble, una historia que compartimos muy pasionalmente. No fue mucho tiempo quizás, pero fue intenso. Vivimos juntos cosas muy zarpadas: logros profesionales y personales… y me quedo con todo eso tan hermosos. Hoy los planes y las vidas de los dos, ya no iban muy de acuerdo. Entonces tomamos la decisión de seguir cada uno su camino, porque era mejor para los dos. Y se entiende que, en una pareja, la determinación de separarse no es de un día para otro. Una crisis siempre tiene un tiempo de maduración. Ya veníamos charlando sobre lo que sentíamos, sobre lo que nos estaba pasando".
"Hasta febrero estuve en Europa, y en marzo, después de cerrar la gira aquí (se suspendió por el aislamiento preventivo y obligatorio), nos iríamos, durante casi tres meses, a grabar una serie juntos. Y hubiese estado bueno aprovechar ese tiempo para reconectarnos como pareja", nos contó. "Pero la cuarentena nos atrapó, a él en Colombia y a mí aquí. Y la distancia jamás ayuda, había necesidad charlar personalmente. Nos hubiese encantando que así fuera pero no tuvimos chance. Consideramos que lo más sano ese caso fue cortar. Y entender que, tal vez, ese era tiempo para aferrarnos a nuestras familias. Y vivir el cierre de ese modo".
Conociendo tu grado sensibilidad y sabiendo, entonces, que todo te afecta de algún modo, ¿Cómo te armó frente a la ola de rumores internacionales respecto de su separación? "Tener que salir a hablar del tema no fue lo más cómodo, por eso decidimos hacerlo juntos desde nuestras propias redes, porque creímos que era lo mejor para cuidar la relación que tuvimos. La versión real y oficial salió de nuestras bocas. Y tal como te dije, nuestra separación, que fue un proceso muy íntimo, jamás tuvo que ver con nadie más que con nosotros mismos", respondió.
El comunicado publicado en simultáneo por los dos, el pasado 16 de mayo, decía: “Queríamos contarles que con Sebastián decidimos terminar la relación”, indica de inmediato Martina -luego de un “Hola...”- en el comunicado que hizo llegar a sus fans mediante las redes sociales. Y luego, siempre hablando por los dos, resaltan que con el músico colombiano tuvieron “momentos hermosos”, y permanecerán “lindos recuerdos” en sus corazones, pero “a veces las cosas no se dan como uno las imagina”.
¿El amor a la distancia, es su gran karma en esta vida? Tini comentó: "¡Andá a saber! (risas) Pero creo que será siempre así, no me queda mucha posibilidad. La distancia es un factor que estará presente siempre en todas mis relaciones, y no sólo de pareja. El tema está en saber acomodarla en cada vínculo. Pero no le temo. Ni es negativo. Es un rasgo más de mi carrera, y también suele tener cosas hermosas. Muchas veces me ayudó a afianzar situaciones y emociones personales. Aprendés a valorar más lo cotidiano, que quizás, en la diaria sólo pasa… Y cada reencuentro se hace más especial".