El marido de Carolina “Pampita” Ardohain tiene su propio equipo de fútbol, dirige y motiva al de su hijo Santino (15) y además juega con Los Espartanos, de la Unidad Penal 48. Así se propone “educar a través del deporte”.
Tras su paso por PH (Telefe), Roberto García Moritán (42) logró cobrar popularidad más allá de Carolina Pampita Ardohain (42), su mujer desde hace siete meses. No sólo logró conmover con su relato de la conquista a la modelo y conductora, sino también con su actividad a la cabeza del proyecto solidario Asoci.Ar, que asiste a las poblaciones más pobres para prevenirlas del COVID-19.
Otro aspecto desconocido de Roberto es su actividad deportiva. Apasionado por el fútbol –y vistiendo la 14–, el fanático de Racing, forma parte de Mamá Rusa, un equipo que logró el título de Campeón 2019 en mini-torneos anuales contra otros como los Distintos, Opisu o La Bomba. Y en pos de su desempeño, Roberto entrena a diario (hasta los domingos) en el gimnasio del edificio en donde vive y al que califica: “El mejor lugar para pensar”.
Además, siempre con conciencia social, fue uno de los promotores de llevar Mamá Rusa al Complejo Penitenciario San Martín. Bajo su lema “educando a través del deporte” –como suele decir–, y vistiendo su camiseta 14, se enfrentó con los Espartanos de la Unidad 48. “Algún día saldrán en libertad, ya sabrán que hay una segunda oportunidad esperándolos, lejos del crimen”, posteó en su última visita.
Recordemos que la Fundación Espartanos es una organización sin fines de lucro que se sustenta con el deporte de voluntarios y donantes, y que busca bajar la tasa de reincidencia delictiva promoviendo la integración, socialización y acompañamiento de personas privadas de la libertad a través del rugby, la educación, el trabajo y la espiritualidad.
Y por si fuera poco, García Moritán brilla desempeñándose como director, coach y motivador del equipo Club Atlético Santos, en el que juega su hijo Santino (15), fruto de su matrimonio con Milagros Brito, quien ante una victoria del team posteó: “Esto pasa cuando se logra motivar a un equipo para que sean la mejor versión de ellos mismos”. Según los adolescentes a los que dirige, “es el Gran DT”, como lo llaman.
“Cuando lo importante ya no es tuyo”, escribió Roberto debajo de una foto en la que se lo muestra atento al desempeño de Santos. “Vivo, sufro, río y aprendo a través de ellos. ¡Gracias! Ya hace tiempo que nada es mío”.