La modelo rompió el silencio para aclarar la medida de aislamiento social que tomaron con Marcelo Tinelli.
Horas antes de que Alberto Fernández establezca por decreto la cuarentena obligatoria en la Argentina como prevención contra el coronavirus, Marcelo Tinelli arribó al Aeropuerto de la ciudad de Esquel, en Chubut, acompañado por Guillermina Valdés, su hija Candelaria, su hijo Lorenzo y dos de los hijos de su esposa.
Allí se hospedaron -para pasar la cuarentena- en una lujosa mansión en Campo Trafipán, que el conductor compró en 1999.
Ante la polémica que se generó desde las redes por su partida hacia esa ciudad, Guillermina Valdés decidió romper el silencio y aclarar la medida que tomaron.
"No estamos de vacaciones, teníamos la posibilidad de hacer la cuarentena en Esquel, ya que Marcelo tiene domicilio acá hace 22 años", comenzó diciendo firme la modelo..
Luego, remarcó: "Es hacer la cuarentena acá, encerrados, como todos, haciendo home office como veníamos haciendo. En la casa que venimos varias veces al año".
"Estaremos hasta el 31 o hasta cuando nos indiquen las autoridades, como corresponde. Aclaro solo porque no son vacaciones, realizamos todos los cuidados y controles que nos indicó el gobierno de la provincia en el traslado e ingreso. Gracias", cerró la modelo en su comunicado a través de Instagram stories.