Como cada año en los Países Bajos se vive con gran expectativa el Prinsjesdag, el llamado Día del Príncipe, festividad en la que se oficializa la apertura del Parlamento tras el verano.
El principal atractivo del evento es que, además de contar con personalidades de diferente índole y políticos, la familia real se reúne y se engalana para la ocasión.
Este año, además del tradicional cortejo encabezado por los reyes Guillermo y Máxima, la princesa Alexia, segunda en la línea de sucesión al trono holandés, debuta al asistir a tan significativo festejo, del que su hermana Amalia participa por segunda vez.
Sobre esa línea, aunque las royals de los Países Bajos llamaron la atención con su derroche de color en su desembarco al palacio Noordeinde en carruaje, fue la segunda hija de Máxima Zorreguieta quien captó todos los reflectores con otro look 100% Máxima.
Es que luego de protagonizar su primer acto en solitario en Róterdam y reciclar uno de los icónicos vestidos del guardarropa de su madre, un diseño bicolor de Oscar de la Renta, Alexia de Orange volvió a rendirle homenaje a su madre al inspirarse en su colorido estilo.
Los looks de Alexia, Máxima y Amalia de Orange en el Día del Príncipe
Alexia de Orange
Con guantes de piel y un vestido de color azalea de la firma Zhivago, la princesa Alexia volvió a deslumbrar con una glamorosa puesta en escena que, según los críticos de moda, la royal viene pisando fuerte con su nuevo cambio de estilo y semblante real: de su faceta rebelde a una joven princesa con mayor madurez.
El modelo, confeccionado con un tejido de poliéster elástico de color azalea, una tonalidad de la familia cromática del rosa, presenta hombreras voluminosas, escote en pico, manga larga muy ajustada, una especie de vuelo en la parte superior, cintura ceñida y una falda de silueta sirena con cola.
Totalmente forrado, el vestido de Zhivago incorpora una cremallera invisible en la espalda, y se completa con unas costuras en relieve en la zona de las caderas que simulan dos bolsillos y también el mismo adorno en el abdomen.
Otros guiños de Alexia a su madre Máxima fueron los accesorios que eligió. Por ejemplo, los guantes cortos de piel en color granate, habituales en los atuendos de su madre, como también el sobre de mano tipo cartera que, aunque no lo lució en todo momento, se lo pudo apreciar al bajarse del carruaje.
Máxima Zorreguieta
Para esta ocasión, Máxima Zorreguieta quiso desafiar los tradicionales códigos de vestimenta de la corona holandesa con un look vanguardista para este tipo de ceremonia. Es que la Reina quiso demostrar que las tradiciones también pueden evolucionar, ya que unos pantalones pueden ser igual de elegantes en un evento solemne que un vestido de gala.
El look que marcó un hito para Máxima es una creación del diseñador danés establecido en los Países Bajos, Claes Iversen, que se trató de un mono confeccionado en tono durazno y compuesto por un pantalón palazzo junto a un escote redondo.
Aunque los pantalones captaron la mayor atención del atuendo de la Reina, al ser la primera vez que se elige esta prenda para tal festejo, su abrigo no pasó desapercibido: se trató de un modelo largo que casi llegaba hasta los pies con uno de sus estampados favoritos, el floral.
Amalia de Orange
Por su parte, la princesa Amalia optó por un diseño de la firma de vestidos de gala favorita de Meghan Markle: Safiyaa. Al que le añadió dos elementos prestados de su madre, siguiendo fielmente las reglas de estilo.
La heredera al trono se inclinó por un vestido largo con un cuerpo drapeado y mangas tres cuartos en un vibrante azul klein.