Decoración zen y un sinfín de recuerdos. Carolina Baldini (50) revive cada día la historia familiar al recorrer su casa de Nordelta, testigo de los momentos más felices y de aquellos tiempos en los que se transformó en un refugio mientras vivía sus días más complicados cuando en la pandemia se encontró sola tras ver como sus hijos emigraron a Europa.
“Me gusta la decoración zen y siempre sumo algún recuerdito de todos los viajes que hago a lo largo del mundo”, cuenta a Revista GENTE al mostrar como nunca antes la propiedad en una nueva edición de Puertas Adentro.
Fotos de viajes y momentos icónicos para la familia, son protagonistas de los ambientes en tiempos en donde muchos hogares se despersonalizaron por la falta de fotografías que fueron sepultadas por la era digital.
La primera foto profesional que le tomaron cuando tenía 16 años, retratos que el fotógrafo Chris Beliera, de GENTE, le hizo junto a su novio, Pablo Pereyra; la camiseta de Giovanni cuando jugó en River Plate, botines de sus hijos y fotos de los tres en el club millonario son algunos de esas joyas que conserva con orgullo.
“En el jardín me encanta meditar. Hay una paz enorme, se escuchan los pájaros y me puedo conectar con mi interior”, cuenta.
Tonos cálidos y elegancia
En la planta baja, los tonos cálidos combinados con la madera son la clave. Un amplio living es separado por una pared de vidrio del quincho, espacio de encuentro para las divertidas juntadas con amigos y familia.
El quincho es uno de sus lugares favoritos y un punto de encuentro. “En casa me encanta bailar y hacer asados, aunque ustedes no lo crea nos reunimos con mis amigas y siempre pongo música. Es un buen lugar para estar con familia y seres queridos", cuenta.
Los objetos espirituales de Carolina Baldini
"Me considero una mujer espiritual. Medito un montón. Creo que Giovanni sacó un poco de eso", dice a Revista GENTE.
“Soy una mujer sencilla que quiere ayudar a los que tiene alrededor. Mi frase de cabecera es no olvidarme de donde vengo”, dice.
"Hago una alimentación super sana, entreno un montón: hago motocross, windsurf, y esquío. De todo. Nunca tuve un quiebre con la edad o con el hecho de pasar la barrera de los 50 años", cuenta al dar detalles de su vida.
Y relata: “Antes era muy impulsiva y ahora vivo más el presente, sin pensar en lo que va a pasar más adelante. Me encanta la metafísica y soy de visualizar las cosas que quiero para mi vida. Eso me ayudo a mantener un equilibrio”.
Fotos: Chris Beliera.
Video y edición: Cande Petech y Ramiro Palais.
Producción y estilismo: Jazmín Ochoa.
Peinó: Miguel Genaro @miguegenaro
Makeup: Carolina Pesce @caritopesce_maquilladora
Agradecemos a: Natalia Antolín @nantolin, Claudia Arce @claudiaarceok, Buenos Aires Denim @bad.buenosairesdenim, Luciano Marra @lucianomarraok, Valdez @valdezshoes y a Duvet Home @duvet-home.ar