"Están generando psicosis". Eso es lo que decían hace unos días los expertos en realeza ante el "enigma" Kate Middleton (42), quien había desaparecido del foco público. Mucho se ha escrito por entonces acerca de por qué la casa real británica prefería el silencio e incluso subirse a un operativo distracción en el que mandaban las teorías conspiranoicas desperdigadas en las redes sociales.
Después de casi un mes de su último acto público (25 de diciembre) y de que se especulara que el equipo de relaciones públicas de la corona planeaba un operativo regreso para Pascuas, la futura reina de Inglaterra reapareció el 22 de marzo, tomó las redes oficiales y compartió un video filmado por la BBC en el que reveló que padece cáncer, admitiendo ante la ciudadanía británica (y el mundo entero) "el gran shock" que atraviesa su familia.
Para esta nota, Revista GENTE dialogó con expertos en realeza para analizar el mayor misterio royal de los últimos años que pasó de ser una historia llena de intriga y especulaciones a una de resilencia. Tras el testimonio en primera persona de la princesa de Gales, de quien se tejieron las más alocadas teorías (se habló desde un coma inducido hasta un supuesto suicidio, una posible abdicación del rey y el plantado de una doble), nos preguntamos cómo seguirá el destino de la corona inglesa y por qué, "al no posicionarse como mártir, no quiere ser la nueva Lady Di".
Cronología de un escándalo real: de la desaparición pública de más de 80 días a la verdad de Kate
A poco de que se comunicara que el rey Carlos III atraviesa un cáncer (según se dijo, de próstata), la esposa del príncipe William no titubeó al explicar: "En enero, me sometí a una importante cirugía abdominal en Londres y en ese momento se creía que mi enfermedad no era cancerosa. La cirugía fue exitosa. Sin embargo, las pruebas tras la operación hallaron que había habido cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico recomendó que me sometiera a un tratamiento de quimioterapia preventiva y me encuentro ahora en sus fases iniciales".
En el video, Middleton confesó que el diagnóstico (un tipo de cáncer no especificado) supuso un "gran shock" y que ella y el príncipe William estuvieron "haciendo todo lo posible para procesar y gestionar esto en privado por el bien de nuestra joven familia". A la vez, la suegra de Lady Di reconoció que se trataron de un "un par de meses increíblemente difíciles" para toda la familia.
En relación a cómo les comunicó la noticia a sus herederos, expresó: "Como pueden imaginar, esto llevó tiempo. Me ha llevado tiempo recuperarme de una cirugía importante para comenzar mi tratamiento. Pero, lo más importante, nos ha llevado tiempo explicar todo a George, Charlotte y Louis de una manera que sea apropiada para ellos, y asegurarles que voy a estar bien".
Kate y su esposo, William, decidieron estratégicamente esperar al 22 de marzo para comunicar la noticia. La fecha elegida tuvo que ver específicamente porque a partir de ese día en todos los colegios del Reino Unido dieron comienzo a las vacaciones de Pascua. La estrategia que usaron para proteger a los niños de posibles cuestionamientos y las miradas inquisidoras fue esperar al receso escolar.
La delicada información que manejaba la prensa británica: "Creemos lo peor"
Con el diario del lunes y la noticia sobre la mesa, la historia fue distinta. Pero lo cierto es que las especulaciones acerca de lo que había pasado tras la desaparición pública de Kate cobraron una dimensión inusitada. Tanto es así, que en medio de que la BBC prometiera un importante comunicado que sería revelado "en un plazo de entre 48 a 72 horas", los propios periodistas de la cadena manejaban versiones de lo más variadas.
En diálogo con GENTE, una periodista de la cadena que prefirió el estricto off the record en medio de horas decisivas (y una avalancha de fake news), sostuvo que el comunicado iba a suponer un "cimbronazo" y se aventuró a explicar: "Manejamos varias teorías. Creemos lo peor. Se habla de depresión, una grave enfermedad y hasta se comenta intento de suicidio por un supuesto embarazo extramatrimonial".
Por su parte, el escritor y experto en realeza Rob Johnson, que viene escribiendo por más de 35 años sobre la familia real británica, fue escueto pero se refirió a las dilaciones y el "grave problema de credibilidad" que enfrentaba la corona a la hora de informar lo que sucedía. Lógicamente, ante la incertidumbre, nadie se animaba a hacer declaraciones por fuera de lo estrictamente prudencial. Además, en diálogo con este medio, insistió que era imperativo "ser diligentes" y que deben hacer "una reestructuración".
Eugenia Garavani, experta en realeza y colaboradora de Vanidades y Caras México, también habló con GENTE, y en medio de la inexplicable desaparición de la princesa, precisó: "Creo que la cirugía abdominal, por la que debió pasar tanto tiempo en el hospital, se complicó. Y si bien aún no se sabía exactamente la situación por la que atravesaba Kate, cuestionó: "Me parece muy extraño el hecho de que hayan sido tan abiertos a la hora de especificar data sobre la cirugía de Carlos y no estar siendo tan transparentes con Middleton".
Sin ningún tipo de certezas, Garavani dio en la tecla: "Yo creo que, sin dudas, un cáncer es algo muy delicado. Y si aún callan en el caso de Kate, con esta estrategia de ser tan herméticos, se están anticipando a algo muy delicado. Fijate que en el caso del rey, el tratamiento de esa enfermedad puede causar estragos, pero en su caso, si se trata de próstata, todo indica que, si se detecta a tiempo, no es algo tan terrible como un cáncer de páncreas o de estómago".
Por qué la corona británica "centró la atención en Kate" y el "factor Harry"
Según Garavani, a Kate y al príncipe William les molestó mucho la atención que Meghan Markle y el príncipe Harry obtuvieron, y es por eso que mientras la corona se tomó su tiempo para procesar la noticia, también dejaron correr las fake news: "Más allá de si realmente entre ellos hubo celos o no, nos están demostrando lo importante que aún es la monarquía y cómo un personaje como ella mantiene a la gente en suspenso".
Las diferencias entre Harry y William, expuso la también escritora fantasma antes del testimonio de Kate, no son menores: "William es muy reacio a los medios y está molesto por el acercamiento que está teniendo Harry con su papá desde su enfermedad y porque los niños ya se apellidan Sussex; es decir que eso ya les da otro status. A la vez, William tiene que cumplir con muchos compromisos, está muy presionado, y todo esto es alarma de que la casa real británica está atravesando una crisis".
No hay dudas de que el factor Harry podría ser un verdadero fantasma para William. Hay que tener en cuenta que el heredero al trono podría querer correrse a un costado en pos del bienestar emocional de su mujer y sus hijos.
Las diferencias entre Kate Middleton y Lady Di, el karma de la infidelidad y la "mafia" real contra el periodismo
"Harry se queja de que Camila Parker Bowles filtra cosas a la prensa, pero Lady Di hacía lo mismo. Y no sólo eso. Diana dejó audios de voz en los que contó cosas para que se publicara un libro y se cargó con toda la monarquía sin pensar", añadió Garavani. Recordemos que uno de los hechos por los que Meghan y Harry no estaban al tanto de la enfermedad de Kate es el miedo de William a que, fieles a su estilo mediático, la filtraran.
A la hora de referirse a Middleton, y siempre antes de conocer su palabra oficial, Garavani sostuvo: "Creo que Kate no quiere ser una nueva Lady Di. Sabe que a William le molestaba esa forma de ser de su madre de que todo lo quisiera hacer mediático. Entonces ella no quiere repetir el patrón; a diferencia de Harry, a quien Meghan le resuena mucho a su madre. Porque Lady Di era alguien que directamente les decía a los paparazzi 'Oye, voy a estar comiendo en tal lugar de hamburguesas' para que le cayeran con la cámara y salir en el periódico.
Mucho se habló de una posible infidelidad de William con Rose Hanbury y lógicamente es fácil remitirse a la pública e histórica traición que sufrió Lady Di por parte de Carlos y Camila. En relación al posible karma que pudiera continuar su acecho en la familia, la experta en realeza lanzó: "Lo más probable es que William, traumado por lo que le hizo su padre a su madre, no se atreva a tanto. No la veo a Kate como una mártir, soportando en silencio".
Recordemos que hace muy poco, la condesa de Cholmondeley y ex amiga de Middleton salió a disipar las fake news y dijo que se trataba de "rumores falsos". Claro que no es la primera vez que se la relacionó con el hermano de Harry: en 2019 ya habían circulado fotos de ambos. Lo que la urgió a salir a dar su palabra fue la crisis que se vivió en el palacio. Aún así sorprende todo lo que esperó a desmentir la noticia.
Tiempo atrás, Giles Coren, ex periodista de The Times y experto en realeza, llegó a manifestarse sobre esta traición. "Todo el mundo sabe sobre la infidelidad", tuiteó. Y enseguida lo borró. En diálogo con GENTE la mencionada fuente de la BBC, que pidió reserva, explicó el tema del silencio del periodismo británico sobre el enigma Kate: "Trabajar como periodista en Inglaterra y hablar de la realeza es muy complicado. Son una suerte de mafia".
Cómo se recompuso la corona inglesa a otros escándalos durante el reinado de Isabel II
El mayor escándalo de la casa Windsor al que podemos remitirnos es la muerte de la princesa Diana (31 de agosto de 1997). Eugenia Garavani retomó el hecho, en comparación con el presente, y dijo: "La corona estaba pasando por un tema de imagen muy difícil, estaba siendo muy afectada por el divorcio de los príncipes, querían salir a flote pero no había nadie que los ayudara a tener algo de resplandor. Ya todo eso te daba una idea cómo las malas decisiones de Diana afectaban a la institución, que es lo que más le molestaba a la reina, que Diana fuera tan impulsiva y tan rebelde".
La periodista consultada por GENTE se refirió enseguida al pedido del pueblo que que la reina diera muestras de que Diana le importaba. En ese momento, fue vital el rol del primer ministro Tony Blair, quien se sentó con la monarca a decirle que creía que había cosas que debían cambiar. "Le dijo que había que modernizar a la monarquía, que debía cambiar de actitud y ser más abierta, y ahí empezó a evolucionar, a ser más cercana, y cambió detalles de sus apariciones, como vestirse de distintos colores", apuntó Garavani.
Enseguida, según su lectura, el rol de Harry y William fue fundamental: "La corona sabía que ellos eran atractivos para la prensa y levantarles el perfil era un modo de darle un aire más joven a la casa real. Era una demostración de que con el nuevo siglo venían nuevas formas. De hecho, un gran gesto de la reina en el sentido de la evolución de la corona fue permitirle a su hijo casarse con Camila, el amor de su vida".
La casa real en tiempos de redes sociales y la repercusión de la valentía de Kate
Sin dudas, la monarquía británica se fue adaptando a los cambios de paradigma, y mientras tiempo atrás las noticias de la realeza se daban a conocer en los semanarios impresos, hoy las redes sociales tienen un rol súper protagónico. No sólo allí se desperdigaron en segundos teorías y versiones, los propios periodistas informan en sus redes a título personal con más de una consecuencia.
La propia Garavani recogió el guante y contó: "Hace poco me escribió Beatrice Borromeo, la mujer del príncipe Pierre Casiraghi, para desmentir haber hecho una entrevista que fue tapa de Hola España. Tomó sus redes, citó la publicación que yo había compartido, e hizo su descargo diciendo que cómo se atrevían, que ella sólo había hablado con Paris Match".
Que la corona usufructuó de las fake news en su operativo distracción no es algo menor (aunque perdieron credibilidad, evidentemente ganaron tiempo). Pero el valiente testimonio de Middleton trajo aparejadas otras cuestiones más profundas: una princesa "humana" y valiente, que dio la cara y habló de una enfermedad que hace estragos.
Así lo explicó Matt Wilkinson, editor de The Sun: "Desde que Kate Middleton anunció que padece cáncer, se incrementaron en un 15% las visitas en la web de Cancer Research y hubo record de ingresos en el site Macmillan Cancer Support (una de las organizaciones benéficas británicas más grandes y brinda atención médica especializada sobre la enfermedad)".
En un breve intercambio con GENTE, Wilkinson prefirió destacar cómo la bravura de Kate había hecho posible que "cientos de miles en Gran Bretaña se hagan chequeos médicos". Es que el "efecto Kate" (un mote con el que la prensa se refería a ella en relación a su estilo fashionista, pero que ahora se resignificó) es imparable.
En ese sentido, Eugenia Garavani agregó: "Aún no sabemos si querrá o no mostrarse en Pascuas, pero Kate sabe que en sus manos está ser ejemplo y rol model alrededor del mundo. Creo que su gran fortaleza es convertir su problema en su causa".
¿Podría Harry asumir el rol del rey en el peor escenario?
Acerca del futuro de la corona, con un posible escenario de un William devastado y teniendo que sostener a toda la familia, Garavani planteó: "Como él ya pasó por la muerte de la madre, seguramente se haga a la idea de que su padre, que ya tiene 75 años, corre peligro, pero ser sostén de la madre de sus hijos puede desequilibrarlo. Por eso el acercamiento de Harry a Carlos (cuando lo visitó un mes atrás en la residencia de Clarence House) es un fantasma para él".
Una información que resuena distinto cuando se recuperan las profecías del boticario y astrólogo francés Michel de Nôtre-Dame, que en 1555 publicó su famoso libro Les Prophéties (Las Profecías), más conocido como Nostradamus. "Asumirá el trono un hombre que nunca esperó convertirse en rey", aseguraba en una de sus cuartetas. Una sentencia que podría apuntar directamente a Harry como futuro rey de Inglaterra. Si bien sus predicciones son más que crípticas, es otro condimento a un plot twist que nadie se esperaba.
Fotos: Fotonoticias y archivo Atlántida.
Búsqueda de archivo: Mónica Banyik
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Foto de portada: Gustavo Ramírez