En los últimos días, se ha visto a Charlene de Mónaco cumpliendo con las citas anuales obligadas para la familia principesca. Sobre esa línea, la prensa captó al príncipe Alberto II junto a su esposa y a sus hijos disfrutar en directo del Gran Premio de Mónaco de F1, donde tuvo lugar una incómoda coincidencia de la exdeportista sudafricana con una ex de su marido, la togolesa Nicole Coste.
Sin embargo, a pesar de la incómoda coincidencia, Charlene captó la atención de todas las cámaras y presentes en las celebraciones del centenario del príncipe Rainiero III. Es que, la también conocida como "la princesa triste", brindó su mejor sonrisa y se la vio con un semblante, pocas veces visto.
Sin duda alguna, la princesa Charlene se impuso a los flamantes automóviles clásicos de la colección principesca, que salieron en caravana como parte de las celebraciones del centenario del príncipe Rainiero III
Sobre esa línea, Alberto de Mónaco, las princesas Carolina, Estefanía y Charlene, junto con varios de sus hijos y nietos, salieron a la carretera en algunos de los flamantes automóviles clásicos de la colección principesca. Dando el pistoletazo de salida oficial a las celebraciones por este real motivo.
Además, cabe remarcar que esta es una de las pocas ocasiones recientes en las que se ha podido ver a la princesa junto a sus cuñadas, que ya se reunían el pasado mes de abril precisamente en otro homenaje a Rainiero.