Las celebraciones en torno a la coronación del rey Carlos III quedarán en la historia como la majestuosa inauguración de una etapa nueva para el Reino Unido y su monarquía. Es que en los últimos 70 años no se veía un despliegue de tradición como el que hubo el sábado pasado en la abadía de Westminster, lugar que albergó a las cabezas de todas las casas reales europeas y asiáticas.
El evento histórico fue el pretexto ideal para que las royals y otras influyentes mujeres que estuvieron entre los 2300 invitados desplieguen destacados estilismos. Enfundadas en sus outfits más elegantes, muchas de ellas sorprendieron con los diseños de sus esculturales tocados.
En diálogo con GENTE, la reconocida diseñadora especialista en fascinators, Laura Noetinger, analizó una a una las piezas que escogieron las royals para enaltecer sus looks, las tendencias que se vieron y las claves para elegir el tocado ideal.
Cabe señalar que estas piezas artísticas y artesanales cobraron mayor relevancia luego de que el rey Carlos III dejara de lado en su coronación las alhajas ostentosas y el uso de tiaras con el fin de promover una imagen austera de la monarquía, que estuviera más cerca de la realidad por la que atraviesa la mayoría de los ciudadanos ingleses.
El análisis de Laura Noetinger sobre los fascinators que usaron las royals en la coronación de Carlos III
Entre las monarcas que nunca defraudan con su estilo vanguardista y arriesgado, se destacaron Letizia de España, y Máxima de Orange. Ambas con unos fascinators de diseño estructural.
La reina de España fue de las más aplaudidas con su look "rosa chicle". La monarca sorprendió con un elegante dos piezas de Carolina Herrera que, sin duda alguna, terminó de definir con el sombrero oriental con el que se robó todas las miradas.
Respecto a esta creación firmada por Isabel Terroso, la experta en tocados y fascinators, Laura Noetinger, señaló que esta pieza única es toda una "belleza" que resalta toda la "simpleza del estilo oriental". Sin embargo, remarcó que ella lo hubiese hecho "un poco más pequeño" para no cubrir tanto su rostro.
Sobre el tocado matcheado de Kate Middleton y su hija la princesa Charlotte, Noetinger contó que estas fueron de una de sus piezas "favoritas". Es que ambos tocados "tocados joya", confeccionados con un bordado en hilos de plata y cristales, formaban flores y hojas con efecto tridimensional.
El de la hija de la princesa de Gales fue una versión en miniatura del de su madre. Ya lo decía Benito Fernández en una entrevista con GENTE, "hasta el más mínimo detalle tiene un mensaje".
Sobre esa línea, se puede apreciar en el diseño que llevó la miniroyal apenas una hilera de hojas sin florecer, detalle que habría simbolizado su niñez y todo lo que tiene aún por vivir. Además, el tocado se inspiró en el laurel, un árbol de la familia de la lauráceas, que crece hasta seis o siete meses de altura.
Finalmente, Laura Noetinger analizó el fascinator "asimétrico" que llevó Máxima Zorreguieta en la coronación de Carlos III: "Tenía el diseño de un sombrero plato asimétrico con un moño, de la firma de Philip Treacy"
Asimismo, la artesana argentina destacó que el diseño de la pieza permitió que la monarca de los Países Bajos llevara el pelo suelto: "Me gustó verla con el pelo suelto porque le dio un toque de frescura a todo el look".
La tendencia que predominó entre los fascinators de la Coronación de Carlos III
Haciendo un análisis más macro, Noetinger, quien llegó a trabajar con el diseñador inglés Bruce Oldfield -el artífice del vestido con el que coronaron a Camilla Parker Bowles-, señaló que entre todas las piezas que se vieron en la Coronación, "predominaron los casquetes, las vinchas y los pill box".
Además, la especialista remarcó que observó que, en general, "la sugerencia de la simpleza estaba presente en la mayoría de los sombreros y tocados". Cabe recordar que el dresscode impuesto por el rey Carlos III hacía énfasis en lucir sobrios y sin tanta ostentación.
Entre las vinchas que más destacó la experta argentina, mencionó las de la princesa Mary de Dinamarca y la de Beatriz de York. "La primera me pareció muy elegante y delicada, y la segunda era muy moderna y vistosa", analizó.
Las claves para escoger un fascinator
Este tipo de sombreros o tocados para la cabeza, son piezas artesanales únicas. Según explica la especialista en fascinators, Laura Noetinger, este accesorio tan característico de los actos oficiales de las monarquías tiene que ver con sus tradiciones, protocolos y culturas.
"Hay diferentes tipos de sombreros. Están las capelinas o pamelas -de ala grande-, los sombreros plato -más modernos-, los “cocktail hats” -que son más pequeños-, y también están los fascinators, que son adornos con plumas, flores u otros materiales, que van en una vincha o peineta", menciona la creadora sobre la gran variedad de tocados fashionistas que existen.
Asimismo, Noetinger, quien ha creado alguna de estas obras de arte fashionista para Máxima Zorreguieta, le remarca a GENTE que los “pill box” estilo de sombrero que popularizó Jackie Kennedy, también son muy requeridos para eventos reales. "Hoy en día veo muchos con reminiscencias de los años 50", señala.
Respecto a cómo se debe pensar o escoger este tipo de accesorios para la cabeza, la reconocida diseñadora aclara que la elección o la creación del diseño está sujeto, por lo general, al tipo de vestimenta, la ocasión, y el lugar en el que se lo usará.
"Las claves para escoger un fascinator son tener en cuenta el lugar, qué tipo de evento es, la estación del año. Es muy importante que sea cómodo, que armonice con la ropa, que favorezca a la persona que lo use, que esté a tono con su altura, piel y su cabello", explica la milliner (sombrerera).
Respecto a las reglas de diseño que tienen estos "sombreros de alta costura", la diseñadora argentina comenta: "Las variedades en cuanto a diseño son infinitas. Depende del evento por lo general: por ejemplo, puede ser más llamativo si es para asistir a las carreras de caballos de Ascot, Inglaterra".
Y agrega: "En el caso de ser un contexto más formal, para ir a un templo o una iglesia, los diseños suelen ser de líneas más simples o más pequeño, para no entorpecer la vista de quien se siente atrás".
Sobre esa línea, la milliner argentina menciona algunas reglas en diseño, para los fascinators o tocados que se usen en actos reales: "En los 'royal enclosure' de Ascot se debe cubrir al menos 10 cms de la cabeza. En tanto, para ceremonias que sean después de las 17 hs. no se usa sombrero, se lleva mas bien un fascinator o tocado pequeño. ".
No obstante, Noetinger aclara: "El estilo de cada diseñador o “milliner” es muy personal. De hecho, se sabe quién diseña para quien en la realeza o la aristocracia. Uno ve el sombrero y ya sabe quién lo diseñó y realizó. Algo muy característico es que los propios milliners diseñan y realizan ellos mismos sus creaciones, no utilizan terceras personas".
Arte de portada: Gustavo Ramírez