El domingo pasado, Beyoncé hizo historia en la entrega número 63 de los Grammy, al convertirse en la artista femenina con más gramófonos de la historia. Ese título lo consiguió al alzarse con el premio a Mejor Perfomance, que le valió su vigésimo octavo galardón.
Pero su estilo, a cargo de Schiaparelli –también responsable del impactante y voluminoso diseño de Noah Cyrus, hermana de Miley– se robó los flashes.
Queen B optó por un minidress off shoulder, ajustadísimo en la cintura y con mangas largas con guantes y detalle de uñas metálicas en dorado.
Su dramático estilo con un Schiaparelli en black & gold fue complementado con gafas de sol y enormes pendientes "hechos con una cascada de elementos surrealistas".
"Diseñar es mucho más que vestir, es un arte". Con ese leitmotiv, la firma creada por Elsa Schiaparelli –una de las creadoras de moda más importantes de la historia y amiga íntima de Salvador Dalí– se pensó el exclusivo diseño que la cantante lució en la histórica ceremonia.
Pasados unos días de la gran gala presencial, Be dio a conocer los figurines y hasta detalle de la etiqueta del singular diseño que le valió el título de una de las mejor vestidas de los Grammy.
