Tras haber reconocido públicamente que está en pareja y admitir que no quiere ser mamá, Ingrid - alejada de las pasarelas - tomó una nueva decisión laboral que sorprendió a todo el medio artístico: la modelo abrió su propia heladería.
"Me interesó meterme en ese mundo y yo hice perito mercantil en el colegio así que algo de números sé. Me gusta desafiarme, acá ya dicen ‘la heladería de Ingrid’ y por supuesto me ven ahí, estoy acompañando a los empleados que trabajan ahí", explicó Grudke en referencia a la heladería para la que se encuentra trabajando en Misiones, su provincia natal.
“Estoy en el detalle de que todos se sientan importantes y no se sientan solo empleados. Observo a cada uno que esté bien con lo que hace y el público que vino hasta ahora se fue conforme con la atención y lo rico que son los helados", aseguró en diálogo con Juan Etchegoyen en Mitre Live.
"Decir heladera suena despectivo pero para mí es una empresa muy seria y multinacional, pretende ser el helado más importante del mundo", concluyó en referencia a la franquicia que adquirió de uan reconocida marca de helados.
La historia de amor de Ingrid Grudke y Martín Colantonio
"Lo conocí haciendo temporada en verano en Mar del Plata porque él es nacido y criado allá. Él tenía un bar de verano dentro del parador de las playas del balcón, al lado del faro. Yo estaba haciendo temporada de la obra 'Como el culo'. Justo llegó mi sobrino Santiago que en ese momento tenía 20 años, con su novia que no conocía el mar, y querían ir a la playa y entonces mis compañeros de obra me recomendaron ese lugar. Y lo conocí ahí, por culpa de mi sobrino", recordó en diálogo con GENTE sobre su primer encuentro en La Feliz en febrero de 2018.
"Venía de salir de una relación y no quería saber nada. Él siempre dice 'vi un palito con un short gigante en la playa y no sabía quién era, entonces fui a investigar a ver de dónde salió esta chica'. Y bueno, cuando pasó cerca de mí a él le llamo la atención mi look en la costa y ahí me reconoció pero ya desde que me vio, ya me quería conocer. Pasó por la carpa, se presentó, y después volvimos con mi sobrino pero no me tiraba onda, la hizo bien. Fue sutil. Después me enseñó un poco de surf y ahí me invitó a cenar a su casa, ahí nos dimos el primer beso y empezamos a salir", agregó sobre sus primeros planes ante de oficializar el vínculo.