Lucila Villar, más conocida como “La Tora”, acaba de cumplir 48 horas afuera de la casa de Gran Hermano y todavía está procesando esta nueva realidad. “Yo todavía no tengo idea de nada, recién tuve el celu y a la calle casi ni salí, muy poquito, fui a tomar un café y volví. Estoy feliz: ya con saber la hora, ver algo de pastito, sol, y otra gente... ¡está buenísimo!”, admitió este mediodía en diálogo con GENTE.
Si bien quedó eliminada con el 65,38% de los votos, reconoce que en la calle se encontró con “mucho amor, mucha empatía y buena onda”. Abrió sus redes sociales hace poco y está concentrada en los mensajes lindos que le dejan sus más de 177 mil seguidores.
-¿Qué fue lo que más te sorprendió ver afuera de la casa?
-Lo que más me sorprendió fue ver a Tini. Eso me descolocó, después ya era todo medio sabido el juego de cada uno, que era ir a comer cabezas por todos lados. Ella ya venía desde hacía un par de semanas bardeándome a mí, metiendo púa y yo como fui leal a mi juego, sin traicionar a los míos, yo nunca hablé mal de ella hasta que me peleé. Fue así, se puede ver en cualquiera de los tapes, no hay ninguno bardeándola. Me dolió un poco, pero es Gran Hermano, es un juego. No es para tibios.
Su personaje se desdobla durante la conversación y habla en tercera persona, de un modo seductor para cualquier televidente estratega: “Todas las semanas la Tora recibía una grito. Entonces pensé que algo bien y algo mal estaba haciendo”, sentenció. Cuando quedó nominada, se sintió segura aunque contemplaba todas los posibles finales. “No me creía fuerte... Si se estaban yendo todos Los Monitos, debía ser la próxima. Era 2+2=4”, aseguró.
-¿Qué hubieses cambiado de tu estrategia?
-Con el diario del lunes, hubiese cambiado mis modos. O sea, todo lo que yo pienso, bajarlo de igual manera, pero cambiando los modos. Sé que hubo comentarios que no daban, como el 'Te voy a romper la cara'. Es muy de mi carácter, pero tampoco está copado que vean eso. Porque yo me quejo de Alfa, y después estoy puteando o agrediendo. Tampoco está bueno.
-¿Creés que la casa misma y la convivencia van potenciando estas características de cada uno? ¿Por qué?
-Sí, claro. Aparte lo que pasa es que vos te querés ir, no lo querés ver y no podés, porque la casa es grande pero te ves. Si querés estar solo, la gente viene a buscarte, a tomar mates, a esto, lo otro... Obviamente lo hacen para apoyar, pero a veces una quiere un momento sola y no lo tiene. ¡Ni cuando te bañas!
Confirmó que le gustaría volver a entrar a la casa en la revancha que se hará en las próximas semanas. “Ojalá se dé el repechaje, pero solo con participantes viejos, porque el grupo ya está picado, hay gente que no se puede ver”, comentó sin vueltas.
-Con los que siguen hoy en juego… ¿Quién es tu candidato/a a ganar?
-Me gusta mucho Disney (Julieta) y Nachito. Lo noté más afuera. A Nacho porque lo amo, lo quiero y quiero que gane. Y Disney, porque primero pensé que era un personaje, y después me di cuenta que ella es así, que es buena, que es alegre, que si tiene que decirte algo te lo dice a su manera, es muy divertida, me hace reír. Aparte se lleva bien con toda la casa y es inteligente.
La Tora contó por qué no quiso usar su historia adentro de la casa en LAM
Lucila contó parte de su historia, en la que compartió haber sido víctima de abuso cuando tenía 9 años. Sin embargo, adentro de la casa decidió no usarlo: “Nunca quiero jugar con esa carta. Adentro de la casa era un arma de doble filo. O que empaticen o que no les importe nada... y estaba bien si era así, porque soy una jugadora”.
“Lucila es un combo de todo lo que pasé: desde acoso, abuso, peleas, confrontaciones, exnovios, noche, alcohol, fe, gimnasio, madre, padre... Si yo no hubiese pasado por eso, no tendría el carácter que tengo hoy, y estoy contenta con lo que soy”, cerró orgullosa.
