Santiago del Moro suele ser un conductor bastante pasivo y compañero con todos los famosos que compiten en Masterchef. Pero durante la última gala de eliminación, Santiago no soportó que algunos de los participantes distrajeran a quienes se estaban jugando su lugar en el programa, y demostró su enojo en vivo.
Después de la salvación de las duplas de Denise Dumas, Paula "Peque" Pareto, Juariu y Malena Guinzburg, los únicos participantes que quedaron cocinando fueron Paulo Kablan y Mica Viciconte. Ellos debían preparar un plato en solo 20 minutos para alcanzar así su pase a la siguiente semana.
Mientras cocinaban sus distintas preparaciones, los participantes que estaban en el balcón querían alentar a sus dos compañeros. Al mismo tiempo que los famosos cocinaban, Juariu le comentó a sus demás colegas lo que ella haría si estuviera en el lugar de Kablan o Viciconte. Al parecer su voz se escuchó tanto en el lugar, que Del Moro saltó a retarlos.
"Les pedí silencio ahí arriba, chicos. Aparte, pienso: ¿por qué ayudar a uno y no al otro?", les gritó Santiago, agarrando totalmente desprevenidos a los famosos. "No me parece justo para los chicos. Aparte: el silencio es para que se concentren", concluyó el conductor, antes de continuar dando indicaciones.
"En el balcón se vive como una final. Debe ser lo más parecido a una final que vivimos hasta ahora", explicó Denise Dumas sobre el ambiente que se experimentaba entre los participantes ya salvados.
Al final de la noche, quien abandonó las cocinas de Masterchef fue Paulo Kablan. El plato que hizo fue un kafta de carne vacuna y carne de jabalí con un encurrido de vegetales, salsa de tomate, ajo y cebolla. Pero no le alcanzó para seguir en la competencia.
"Fue divertido y entretenido. No seré cocinero ni lo seré nunca. Desde mañana, seguiré siendo exclusivamente periodista de policiales, que es mi actividad y mi vida. Hace 30 años que hago crónicas policiales, me gusta y me apasiona. Esto lo tomé como un desafío familiar", se despedió Kablan.
