Verano del '98, Rebelde Way, Chiquititas, Floricienta, son algunos de los ejemplos de los éxitos creado por Cris Morena y que marcaron la infancia y adolescencia de distintas generaciones. Además, fueron producciones que vieron nacer la carrera de varios artistas como Lali Espósito, María Eugenia "la China" Suárez, Felipe Colombo, Luisana Lopilato, entre muchos otros. Y Diego Mesaglio, también fue uno de ellos.
El actor interpretó a Corcho, un jovencito de cabello largo que le daba dolores de cabeza a Belén Fraga (Romina Yan), en la serie de Chiquititas. Desde ahí, no paró de salir en distintas producciones que tuvieron reconocimiento mundial. Otro ejemplo de su trabajo fue en Rebelde Way, al darle vida a Guido Lassen.
Pero en 2015 su vida cambió bruscamente por un accidente doméstico que le costó la visión de su ojo izquierod. Esto sucedió cuando Mesaglio agarró una botella de alcohol que había caído al piso, sin darse cuenta que que estaba medio abierta. Al apretarla sin querer, salió un chorro que entró en su ojo.
Al llegar al hospital, no tuvo una buena atención por parte de los doctores que lo asistieron: "No fue ese el problema. Voy a una clínica y me hacen los supuestos primeros auxilios, pero no me lavan bien. Casi ni me lavan y me dan anestesia para tomar cuando me duela. Hice lo que me dijo el médico, pero entre el alcohol que quedó adentro y el exceso de anestesia hicieron que se me queme la córnea y que se debilite todo el ojo", explicó en una entrevista con Teleshow. Los profesionales del Hospital de Clínicas lograron conservar su ojo y su movilidad. Diego se encuentra en lista de espera por un transplante de córnea, con la cual podrá recuperar un 65 por ciento de su visión.
Uno de sus miedos más grandes era no poder volver a hacer lo que ama: actuar. Perdió muchos trabajos, atravesó por etapas de "dolor y depresión", pero como se suele decir: después de la tormenta, siempre sale el sol. Y eso sucedió para el actor.
En 2017, marcó su vuelta a la actuación al interpretar el papel de Tony, en la serie Un gallo para Esculapio. Al año siguiente volvió al teatro, donde compartió escenario con sus ex compañeros de Chiquititas, Santiago Stieben (Roña) y Alfonso Burgos (Matías).
Actualmente, empezó a dictar clases de teatro, cine y televisión el club El Porvenir y en un gimnasio de Luján. Y esta a punto de iniciar las grabaciones de una película junto a Daniel Aráoz. Así, el actor demostró que a pesar de las dificultades que uno pueda enfrentar en la vida, siempre se puede volver a hacer lo que uno ama.