Charlene Wittstock (42) hizo algo completamente inusual por ser una royal. Clásica y consecuente con los protocolos de la realeza, la princesa de Mónaco siempre se atuvo a un estilo simple y elegante. Pero sorprendió a todos con un corte de pelo que puede que sea resistido entre los Grimaldi y ciertamente dará lugar a más de un meme.
En su nueva aparición en los tradicionales eventos navideños, con entrega de regalos incluida y junto a su marido, Alberto de Mónaco, y sus hijos, Jacques y Gabriella, Charlene estrenó una shockeante variante de su –hasta ahora– prolijísimo bobcut.
Es cierto que la cuarentena nos cambió a todos, pero lo de ella es infinitamente superior: decidió reinventarse con un corte irregular al extremo, más largo de un lado que del otro, y se rapó profundamente el lateral de la cabeza y la nuca, un estilo radical que en las redes ya comparan con el de De Niro en Taxi driver (1976).
A continuación, el 360 del nuevo estilo con el que shockeó a la realeza.