La final de la tercera temporada de MasterChef estuvo en boca de todos. Luego de un certamen muy peleado, el premio se disputó entre Tomás Fonzi y Micaela Viciconte. Tras haber ganado la mujer, sus compañeros y colegas salieron a felicitarla por su gran logro.
Quien opinó sobre el último capítulo fue Analía Franchín, participante de la primera temporada del famoso concurso. "No sé si podría pasar por el estrés de una final. Realmente es mucho. Es de un alto nivel de exigencia y más sabiendo que es televisado", y recordó su experiencia: "Me acuerdo que Claudia se reía y yo estaba muda por el nivel de concentración".
La mujer habló con La Once Diez / Radio de la Ciudad sobre la frase que le dijo Fabián Cubero a su pareja antes de la gran gala: “Es tremendo que te digan ‘una final se gana’. Mi hijo tiene 11 años, es muy competitivo y si no gana se frustra y lo padece. Yo trato de decir: no importa, llegaste, hiciste el esfuerzo. Si te va mal y no te esforzaste, sí. Pero si te esforzaste y te va mal, bueno, es una final peleada. Yo creo que en esta instancia y ninguno pierde”.
"Me gusta que haya llegado a ese lugar gente que estuvo desde el principio. Yo hubiera puesto el grito en el cielo si hubiera ganado alguien que llegó a mitad de competencia", comentó ya que en esta edición hubo muchos reemplazos de participantes en varias instancias del programa.
"En una final hay que jugársela. Vos tenés que pensar también en cómo te van a evaluar los jurados. Los pasos tienen que estar integrados. Es realmente difícil", concluyó la panelista.