Pancho Dotto siempre fue un verdadero emblema de la temporada de verano de Punta del Este, pero este arranque de 2023 lo encuentra en la intimidad de su chacra en la provincia de Entre Ríos. En ese predio de cuatro hectáreas ubicado en el pueblo Libertador San Martín encontró su lugar en el mundo, pero también pasó uno de los momentos más duros de su vida.
“El 26 de julio murió mi hermano mayor, yo estaba muy golpeado y sigo golpeado, y aparte estaba muy mal de la columna”, contó el carismático representante de modelos a Hola. Mario Dotto era exjefe de la Brigada de Monte XII del Ejército argentino y tenía una extensa carrera como militar.
Sin lugar a dudas, esta pérdida lo hizo profundizar los cambios positivos que venía adoptando para su vida: buscar la tranquilidad del campo y conectarse con la naturaleza. Las tardes con sus perros, las cabalgatas en caballo o los paseos en autos de colección pasaron a ser un verdadero cable a tierra.
“Tengo seis hernias de disco y problemas en las rodillas. Pero Lorena me ayudó a reconocer que la única forma de estar bien es ocuparse de la mente y el cuerpo. Hoy hago pilates, RPG, osteopatía y kinesiología. Estoy a dieta, en muy poco tiempo bajé 18 kilos con la ayuda de Marcelo San Martín, médico nutricionista y deportólogo”, contó al hablar de esta transformación personal y física que está evidenciando.
Y agregó: “Gracias a todos estos profesionales empecé a funcionar mucho mejor. Hoy tengo una agilidad y una movilidad que quiero tener hasta que me muera. Quiero sentirme joven hasta el último día de mi vida”.
"Pancho hace desfiles de modelos y yo hago desfiles militares"
En 2007, GENTE entrevistó a Mario Dotto quien hizo un paralelismo entre su trabajo en la fuerza y el de su hermano al ironizar sobre los desfiles militares que organizaba y los de modelos que hacía el reconocido manager.
"Compartimos el cuarto hasta que él empezó a ir al Colegio Militar. Tenemos la misma genética. Y la misma pasión por lo que hacemos. Y sobre todo, una enorme constancia en nuestras profesiones. Dios concede la victoria a los constantes: ése es nuestro leit motiv", dijo.
"Con Pancho nos queremos mucho. Nunca rivalizamos. Cada uno estuvo siempre en lo suyo. Yo definí mi vocación antes, y Pancho encontró el camino más tarde. Pero nunca claudicó. Como le decía antes, si algo tenemos los Dotto, es la constancia", agregó.
