El influencer Santiago Maratea estuvo presente en el ciclo de entrevistas de Jey Mammon en La Peña del Morfi. Con un aire distendido el influencer habló de las millonarias colectas solidarias que ha comenzado a realizar ya hace casi un año y que han alludado a decenas de personas en nuestro país.
Pero lo curioso es que además de llegarle continuamente ideas de colectas para ayudar a personas con problemas de salud, comunidades o deportistas, también le han llegado algunos pedidos un poco extraños y en algunos casos bordeando el límite de lo bizarro. “Operación de tetas, me han pedido mucho, todo el tiempo. No es tan bizarro el pedido, pero me llega todos los días. Lo piden como chiste: ‘Santi, pagame la tarjeta, la facultad...’ Me han pedido que pague la deuda externa, y encima hice el cálculo mal", aseguró Maratea.
En relación a la gran adhesión de personas a sus colectas, el joven lo relacionó a su autenticidad y sobre todo a su transparecia,“Yo creo que es una construcción que hice en redes, mostrándome como soy. Mi forma de mostrarme da más confianza porque es más real. Yo no soy tan bueno y siempre lo muestro”.
El sueño de crear la ONG más grande que Google
Con el paso del tiempo Santi Maratea ha descubierto que toda la responsabilidad de las colectas no podía recaer en un solo individuo y durante mucho tiempo se preguntó cómo era posible generar que las personas se organizaran de la misma forma en que lo habían hecho con él, con un fin común, para ayudar a terceros. La solución: "una ONG más grande que Google".
En la entrevista en La Peña de Morfi, aseguró que la idea surge como una “caja de herramientas” para las personas que necesitan ayuda.“Le tengo mucha fe a que con el tiempo esa organización pueda terminar abarcando más de lo que abarco yo”, detalló Santiago Maratea.
“Será funcional para las comunidades, para organizarnos y poder abarcar más y más. Por ejemplo, si juntas a todas las mamás que tienen hijos con cáncer infantil en Argentina, y le das una herramienta, lo resuelven. Lo único que hacen es averiguar e informar sobre la enfermedad. Y faltan recursos, herramientas y contención. Por eso creo que la fundación va a funcionar”, cerró.
