En su primera presentación el artista interpretó tres temas –entre ellos, dos inéditos– frente a setecientas personas y dejó su corazón al descubierto. Acá, la intimidad del show, su testimonio y los estilos de los invitados.
Frente a ciento cincuenta fans –elegidos a través de un concurso de YouTube–, y quinientos cincuenta invitados, entre amigos, colegas, gente de prensa y personas queridas de su entorno, Fernando Dente hizo realidad uno de sus sueños: se lanzó como cantante.
Lo hizo con un look total white inspirado en los 80, a lo Freddie Mercury, y acompañado por ocho bailarines, en su mayoría compañeros de Aladdin, será genial, la obra teatral que él protagoniza desde el 2018.
Después de estrenar Todo lo que quieras, una canción inédita, miró al público, sonrió, y dijo: "Esta es una noche muy esperada por mí. Si bien publique la canción Voy hace ya casi una semana, para mí hoy es el verdadero lanzamiento. Es estoy en un escenario que es donde ustedes me conocieron, donde nació este vinculo y donde lo hicimos crecer… y de alguna manera por eso estoy acá hoy".
"Me acuerdo que a los catorce años me senté en la última fila de arriba de este teatro. Me había traído mi mamá y yo entre solo porque no nos alcanzaba la plata para poder entrar los dos", dijo mirando las butacas bordó del Teatro del Globo. Luego, continuó su recuerdo: "Ella me había dado veinte pesos y yo los usé para comprar el programa de lujo de El fantasma de Canterville, la obra de teatro de oscar Wilde que había ido a ver. Ya en ese entonces soñaba con ser actor y con estar en un escenario. Ni ahí imaginaba todo lo que paso después… como tampoco imaginaba en esta persona en la que me iba a convertir".
"La música me hizo sacar peso, mochilas, secretos y prejuicios. Y ahora voy a mostrarles una canción que nació hace menos de un mes, cuando pude volcar en una canción lo que me estaba pasando en mi vida después de tener un momento muy fuerte y de mucha ebullición personal y pública", confesó antes de empezar a interpretar Mi orgullo es mi verdad.
La interpretación terminó con él mirando el cielo con los brazos extendidos, y con el público aplaudiéndolo a rabiar.
Después, ya en la intimidad, él dijo: "¡Estoy feliz! Disfruté cada momento sobre el escenario porque no quería que se me pase nada. Si me preguntás, sueño con hacer shows en muchísimos lugares, y hay uno en particular que se me viene a la mente… pero no me animo a decirlo porque me da pudor, así que por ahora, va a ser un secreto".
Fotos: Julio Ruíz.