Luego de la fiesta que realizó Lourdes Sánchez para celebrar el cumpleaños de Valentín, el hijo que tiene en común con el Chato Prada, las redes sociales explotaron con teorías sobre la ausencia del productor de Marcelo Tinelli. ¿Se habrá separado? Esa fue la pregunta que todos se hicieron.
Es por eso que la bailarina tuvo que salir a aclarar qué estaba pasando con el vínculo a través de su cuenta de Instagram. “Yo leí a varios preocupados, si con Pablito todo bien, si estábamos peleados”, comenzó a relatar.
Y sentenció: “Chicos, estamos súper bien. No estuvo ayer en el festejo que le hice a Valentín acá en casa porque estaba grabando, estaba trabajando”.
“Por eso, la semana que viene, el 9, le hacemos el cumple porque él puede estar. Solamente por eso, yo quería hacerle algo chiquito el día de su cumpleaños. Pablo no puede estar solo por ese motivo, no es que estamos peleados. Difícil que me pelee con Pablito”, cerró.
Lourdes Sánchez recordó el dramático momento que vivió hace 3 años cuando la operaron de urgencia
En el año 2019 Lourdes Sánchez se encontraba sufriendo un fuerte malestar en el abdomen que la llevó a visitar la guardia clínica. Allí le dieron el peor diagnóstico: los estudios determinaron que tenía una gran infección y debían operarla de inmediato. Los médicos tomaron la decisión de quitarle las trompas de Falopio y el vaso. "Estuve a un paso de la muerte y, cuando eso pasa, valorás mucho más todo, hasta lo insignificante o las pequeñas cosas cotidianas", reflexiona en diálogo con GENTE.
"Hoy estoy bien. Me hago estudios cada seis meses, me cuido mucho, tomé otra conciencia. Es importante el chequeo, seguir al médico, estar controlado... Yo me operé la columna también, vengo baqueteada (se ríe), y a veces eso es lo que me causa dolor. El año pasado estaba por entrar a 'Sex' y me tuve que bajar porque empecé de nuevo con el dolor en la columna. A veces yo me cebo y digo 'Bueno, estoy 0 km', pero no lo estoy", confiesa la bailarina.
Luego de la traumática experiencia del 2019, Lourdes asegura: "Ahora todo me parece liviano, no me hago malasangre. Antes me afectaban un montón de cosas insignificantes y hoy disfruto hasta lo malo, le busco la vuelta a decir 'Bueno, por algo pasan las cosas'. Al estar a un paso de la muerte, valorás mucho más todo, hasta lo insignificante y las pequeñas cosas cotidianas", asegura con la simpatía que la caracteriza.
