Luego de casi tres años juntos, Laurita Fernández y Nicolás Cabré se separaron. Después de hacerlo público en las redes sociales, la artista reparó en que las cosas entre ellos no quedaron tan mal como se especulaba más allá de los chispazos que suele acontecer en episodios de esta magnitud.
La historia de amor entre ellos nació en los escenarios, cuando protagonizaron Sugar, en 2019. Ella llegó para reemplazar a Griselda Siciliani y ese fue el puntapié para que Cupido los flechara. Fue amor a primera vista y ante eso, dejaron que los sentimientos marcaran el camino.
Sin embargo, el tener distintas miradas sobre el futuro de sus respectivas vidas, hizo que lo que habían construido se resquebrajara. Se distanciaron en plena pandemia, se dieron una nueva oportunidad, y hace un mes volvieron a separarse, a caminar por distintas veredas.
Marcan allegados que el deseo de ella de ser madre, incluso Fernández no ocultó este sentimiento. Pero también se dice que su crecimiento artístico, sería una especie de sombra para cabré, fue otro de los condimentos que hicieron mella en la relación. Ante esto, por el bien de los dos, se separaron.
¿Cómo quedó la relación? En un vivo de Instagram con GENTE, Laurita despejó todas las dudas. En un momento de la charla, Ronen Suarc le preguntó si volvería a trabajar con Cabré. Teniendo en cuenta que se conocieron en ese ámbito, sería una especie de regresar al lugar en el que empezó todo.
Luego de un gesto, de una mueca, tal vez masticando bien la frase, despejó dudas. Con su respuesta dejó en claro que se distanciaron en buenos términos. “Si, por supuesto que volvería a trabajar con él, no tendría drama. Lo conocí trabajando y si se da la posibilidad nuevamente claro que sí, que estemos separados no sería un impedimento”.