Lali Espósito sigue conquistando el mundo: actualmente instalada de nuevo en España para cumplir con algunos proyectos laborales, brindó una entrevista íntima al diario El País y reveló algunos detalles de sus días siendo una estrella mundial.
A la sesión de fotos fue con una remera de Cher, y la conversación devino rápidamente en la historia de las divas desde su perspectiva. “Fito Páez me dijo una vez que una diva no es vacía, que una diva tiene historia y repertorio. Para mí, aunque la respeto y es una gran empresaria, Kim Kardashian no es una diva. A mis ojos, divas son Britney, Madonna, Mercury, Cher…”.
También, Lali se refirió al episodio de ansiedad que un mal momento de salud mental le disparó. Si bien fue hace algún tiempo, lo contó hace poco. “He aprendido lo importante que es la salud física y mental. Para que el artista esté bien, la persona también tiene que estar bien”, explicó.
Además, contó que no le tembló el pulso a la hora de cancelar shows para darle prioridad a su bienestar: “Tuve que mirar a mi equipo y decir, ‘Chicos, no puedo hacerlo, se me va a paralizar la cara’. Es necesario reconocerte a ti misma que no eres una superheroína”.
“A veces, me he tenido que subir a escenarios pasando por un momento complicado a nivel emocional y hay una especie de voz interior que te habla para decirte que lo que estás haciendo no está bien. Es lo normal, ¿quién está feliz todo el año? No somos robots, pero parece que como Miley Cyrus es millonaria y tiene éxito no se puede quejar”, planteó, muy segura de lo que piensa sobre los momentos complicados que se tienen que atravesar estando arriba de un escenario.
Y lanzó, como un santo remedio: “Yo cuando me siento abrumada, pienso en Messi y se me va todo el abrume. ¿Qué hará ese muchacho?”.
Además de visualizarse en Cher, habló de sus colegas como María Becerra y Tini, que también triunfan en la península Ibérica. "Más allá del talento enorme que tienen estas tipas y cómo lo están aprovechando, me alegro de que por fin sea nuestro turno en la historia cíclica de la música. Además, cada una le aporta una personalidad y una fuerza diferente, no nos parecemos entre nosotras”, analizó, convencida.
Al mismo tiempo, se animó a hablar de la industria: “Hay muchas maneras de que un artista se sienta exitoso sin estar en el top 50. Mi disco físico es el más vendido en Argentina este año. Sería guay que hubiera más sonidos en Spotify, pero es absurdo pelearse con eso”, aseguró, bajándose de las batallas que no considera oportunas.
Y si bien hoy sigue nadando como pez en el agua en la industria que la vio crecer, sabe que el oficio tiene como motor la pasión. “Yo renuevo mis votos con mi profesión todo el tiempo, no la doy por sentada. Me pregunto si sigo enamorada de lo que estoy haciendo, y si algún día siento que quiero otra cosa distinta que poner mi cara frente a la cámara, lo haré”, sentenció.