Gran Hermano volvió el pasado lunes 17 de octubre con 18 participantes que están bajo la tutela de Santiago del Moro. No obstante, un dato llamó la atención de los televidentes: hay una nueva regla que prohibe que los participantes tengan relaciones sexuales si bebieron alcohol.
Esta incógnita salió a la luz porque Juliana Díaz y Maxi Giudici desean tener relaciones sexuales y estuvieron pensando cómo hacer para tener intimidad sin ser captados por las cámaras de televisión. Esto hizo que Pampito, el panelista de Ciudad Magazine, se preguntara en Twitter si podían o no tener relaciones.
Al poco tiempo, Laura Ubfal le contestó que si podían, pero que había una serie de reglas y requisitos que debían cumplir para poder concretar y que ellos lo saben porque lo firmaron en el contrato que los habilita a participar. Primero, deben "estar sobrios", o sea sin una gota de alcohol en sangre; y además, tienen que "mirar a cámara antes del acto y decir OK o levantar el pulgar" ante las cámaras para que la producción sepa del acuerto mutuo.
El antecedente español
El conocido como 'Caso Carlota' es el nombre con el que se conoce la causa del abuso que habría cometido José María López contra Carlota Prado bajo la atenta mirada de las decenas de cámaras y micrófonos de Gran Hermano España.
Carlota y José María López habían forjado un vínculo en la casa española e incluso se definieron como una "pareja oficial" y pidieron una hora sin cámaras para mantener de nuevo relaciones sexuales. Sin embargo, durante una fiesta y con alcohol de por medio, la situación se fue de control. Horas después, José María fue expulsado de la casa y Carlota salió del encierro.
Tras las preguntas que se hicieron los espectadores en las redes sociales, uno de los máximos responsables del "reality show" acude ante la Guardia Civil de Colmenar Viejo, Madrid, y denunció una violación de José María ante Carlota. El caso aún no se cerró, Carlota Prado continúa en juicio con la producción del programa y con José María López; el juicio debía realizarse en febrero de este año, pero la víctima no pudo asistir por "problemas de salud mental" y fue reprogramado para noviembre.