En el día de su cumpleaños número 43 y a tres meses de anunciar oficialmente su separación de la China Suárez, madre de sus hijos Amancio y Magnolia, Benjamín Vicuña reflexionó sobre este "segundo tiempo" que atraviesa en su vida, y ya recuperado de los "palos" con los que la vida, asegura, le enseña a vivir.
Más resiliente que nunca y aún en medio del duelo de su separación –que como se sabe estuvo además marcada por infidelidades–, el actor chileno compartió en Instagram un sincero escrito en el que, con su pluma habitual, hizo un balance de cómo se encuentra personalmente.
El balance de Benjamín Vicuña a tres meses de separarse de la China Suárez
"En el anticuario de mi vida. Entre planeadores, terremotos y con la cordillera como telón de fondo. Cumplo 43 años y hoy soy un hombre nuevo y no hablo del de Trotski. Me encuentro conmigo. Sigo buscando las mismas respuestas. La infancia es fundamental pero no es todo, marca pero no define", arrancó Vicuña en su publicación que acompañó junto a tres fotografías.
Y continuó: "Hoy camino sin miedo a la muerte, en los bosques más bellos y respiro profundo el futuro. Hoy soy lo que quiero ser, lo que puedo ser. Gracias vida por enseñarme a palos lo que es vivir, por cada paso que di en las direcciones más extrañas y que hoy me conforman en esto".
Vicuña, resiliente y más fuerte: "Gracias por perder la fe, aunque ganas no faltaron"
Para finalizar su sentido e intelectualizado texto, agradeció al amor, "motor esencial de nuestra existencia". Y escribió: "Gracias por no perder la fe, aunque ganas no faltaron. Vamos por un segundo tiempo con más herramientas para ser feliz y con mis hijos que me llenan el alma y orientan cada segundo. La vida y sus obstáculos que no son más que una escalera al cielo".
Para acompañar su posteo en el que celebra su nueva ronda al sol y que coincide con el día elegido por Star+ para emitir la esperada palabra de la China sobre el wandagate, el actor eligió, además de una postal de cuando era niño, fotografías que remiten a su infancia y a su juventud.
En clave nostálgica, Vicuña seleccionó imágenes de vinilos de Charly García y de Queen y una fotografía en un viejo anticuario en el que se destacan antiguos teléfonos, muy clásicos de los ochenta.