Comenzó como un juego. En realidad, fue después de jugar. "Hace unos tres años compramos un Mapamundi para colorear en Estados Unidos. Pasamos un momento extraordinario, en el que dejamos las pantallas y nos pusimos a explorar el mundo desde nuestra casa, y eso para mí fue impagable. Traté de comprar uno en Argentina y no había", cuenta Juan Minujín (45), ansioso por el lanzamiento de un nuevo objeto de Atlantis, la marca de mapas y juegos que creó hace poco más de dos años.
Mucho antes de eso, Juan ya se reconocía fan de la geografía. Adjudica a sus padres esta pasión por los mapas, las historias y los itinerarios . "Mi mamá es socióloga, pero dio y todavía da clases en la facultad de geografía; mi papá es matemático pero siempre se dedicó mucho a la demografía. Entonces en mi casa había muchos mapas". Y señala que cuando era chico tuvo el privilegio de viajar con sus padres y algo de eso se hizo manifiesto a la hora de lanzar su línea de objetos.
"Me crié en México. Viví allí hasta los 8 años. Tuve la suerte de viajar varias veces a Europa con mis papás y mis hermanos y una de las actividades que hacíamos en los viajes era ir a los museos y llevaba cosas para dibujar", recuerda. Entonces, aparece en el juego el segundo ingrediente clave de Atlantis, que surgió como un proyecto lúdico en el que los colores tienen un rol protagónico. "Dibujaba con mi papá, tengo muchos recuerdos de eso. Los chicos dibujan todo y de pronto se empieza a perder esa actividad. Y eso por suerte mi papá no lo abandonó nunca. Me transmitió mucho esa idea de poder dibujar".
Juan reconoce que ésta es una de las actividades que le permiten compartir tiempo con sus hijas, Amanda y Carmela, a quienes espera contagiar su amor por los mapas. "En mi familia siempre fuimos apasionados del Atlas, de esta idea de poder conocer el mundo desde tu casa", dice.
"A mí la actividad de dibujar y colorear siempre fue algo que me gustó mucho. La comparto con mis hijas"
Juan Minujín
Luego de su frustrada búsqueda de mapas "hechos en Argentina", Juan pensó que era una buena idea crearlos. "Me aventuré en esta idea de poder producirlo acá. Llamé a Josefina Jolly, que es una ilustradora multipremiada, le conté la idea y así se fue armando el proyecto", dice. Las otras dos personas clave en Atlantis son la periodista Inés Ulanovsky, que edita el contenido para que además del costado lúdico los objetos de la marca tengan un agregado didáctico; y Julieta Ulanovsky, que está detrás del diseño de la marca y el packaging.
Concibió la marca –cuyo objeto insignia son los mapas gigantes para colorear, pero que también incluye rompecabezas y probablemente en el futuro más objetos creativos– como "una buena opción para jugar, aprender y desconectarnos de las pantallas" y está seguro de que estas actividades derivan en momentos compartidos en familia o entre amigos.
"Me gustaría transmitirles a mis hijas que se puede no abandonar nunca la curiosidad", dice cuando piensa cómo este proyecto es símbolo de mucho de lo que comparten en familia y con la certeza de que "curiosear" es la puerta de entrada a un "universo muy lindo".
Juan Minujín y su pasión por los viajes: "Disfruto mucho antes de empezar a hacerlos"
"Los viajes me motivan mucho", revela Juan y agrega: "Volvemos de unas vacaciones y ya estamos pensando en las siguientes. También tengo la suerte de viajar mucho por mi trabajo. Y conocer un montón de otros lugares. Soy apasionado de los itinerarios y disfruto del viaje mucho antes de empezar a hacerlo. Por eso la idea de disfrutar un viaje con un mapa me encanta".
Se reconoce adicto a los sabores. Prueba comida callejera y su souvenir favorito son las especias. Cuando llega a un destino, lo que más le interesa es encontrarse con la cultura. "Me enganchan las historias de la gente que vive ahí, la historia social y política del país, si es un lugar que recibió inmigrantes, si fue una colonia... Todo ese mundo de la historia cultural de cada país es lo que me termina apasionando".
Arte, arte, arte: las obras de Marta Minujín en un mapa de Atlantis
Antes de despedirse, Juan revela su último proyecto. Uno que le genera ansiedad porque es la concreción de un sueño que lleva años gestándose. "El proyecto más grande que estamos lanzando es un mapa con la vida y la obra de Marta Minujín, que es mi tía", cuenta feliz.
Y agrega: "Hace mucho tiempo queremos hacer algo juntos con Marta, y no terminábamos de encontrar el proyecto. A partir de Atlantis pensamos en hacer un recorrido de la obra de Marta que pueda ser intervenido y coloreado. Están el Partenón de Libros Prohibidos que hizo en 1983 en homenaje a la democracia; Pago de la Deuda Externa Argentina a Andy Warhol; La Menesunda; el Obelisco de Pan Dulce; el Lobo Marino de Alfajores en Mar del Plata... Hay un montón de obras que son muy entretenidas para chicos y para grandes", remata tras enumerar algunas de las obras elegidas para este proyecto que incluye –al estilo de Marta Minujín– marcadores flúo para dar vida al mapa.