La foto que Isabel Macedo publicó junto a Julia, su hija menor, generó una ola de comentarios hirientes y discriminatorios por la fisonomía de la pequeña de siete meses. Algo realmente repudiable que demuestra que pocas cosas cambiaron sobre la conciencia de las personas.
Y, en medio de todo el alboroto que se suscitó, con el descargo incluido de la actriz y en una semana en donde también Moria Casán fue víctima de la mirada ajena al posar en bikini en la playa, vale la pena recordar el momento en el que a través de su trabajo buscó hacer un aporte justamente en materia de discriminación.
“Las madres me paraban en la calle y me decían que tuvieron que cambiar a sus hijas del colegio. Yo quería generar conciencia con ese personaje”, recordó este jueves en una entrevisdta que dio junto a Juan manuel Urtubey en “Telenoche”.
Corría el año 2012 cuando Telefe emitió en su pantalla “Graduados”, uno de los últimos grandes sucesos en materia de ficción que tuvo la televisión argentina. La historia se centraba en un grupo de amigos de la secundaria que se reencuentra después de casi veinte años.
Y, entre ellos, se encontraba Jimena Benítez: interpretada por Macedo, era una joven víctima de la burla de sus compañeros y los ataques por su aspecto físico en la escuela.
Toda esta situación le generó tal daño en su vida personal que, con el paso de los años, decidió transformar su cuerpo para estar “aceptable” a la mirada ajena y hasta se cambió el nombre. Ella se reencontró con sus compañeros, ocultó su verdadera identidad y recién un tiempo después confesó el calvario que sufrió.
Jimena retrató el drama por el que pasan a diario miles de personas que son juzgadas por su apariencia. Y el trabajo que hizo la actriz fue desde el respeto y con el deseo fundamental de generar un cambio en el público que veía la tira que cada noche arañaba los 30 puntos de rating.
“El dolor de la gente que me contó sus historias se me hizo carne y no podía hacer menos. Miré 200 mil películas, hablé con gente que pasó por esa situación, me leí todo. La noche anterior a grabar esa escena tan importante, no pude dormir. Soy muy obsesiva y defendí a Jimena a muerte para que llegara hasta el final. Lo de los atracones fueron propuestas mías, que fueron bien recibidas por los autores. Fue armado todo con mucha conciencia y mucha seriedad. Fue una gran responsabilidad y te puede salir bien o mal”, le confió Macedo a Clarín en noviembre de 2012.
“Lo que más me conmueve, si lo pienso en la vida real, es que ningún niño debería hacer un esfuerzo para ser amado. Veo todo el trabajo que Jimena hizo para ser aceptada, escuchada pero siempre se sintió invisible, algo tremendo. Este personaje lo elegí para contar una historia lo más verdadera posible. Y los que me dicen que nunca hago de buena, Jimena es mi personaje de buena. No hay ser más bueno que ella”, definió.
Nancy Duplaá, Daniel Hnedler, Luciano Cáceres, Paola Barrientos, Gastón Sofritti, Julieta Ortega, Mex Urtizberea, Mirtha Busnelli, Andy Kusnetzoff, Natalie Pérez, Juan Leyrado, Violeta Urtizberea, entre otros, integraron el exitoso elenco.
Isabel Macedo reveló que se sintió discriminada en la adolescencia
En el marco de esa entrevista, la actriz se confesó a corazón abierto y contó que en la adolescencia se sintió discriminada “como todo el mundo”.
“Siempre hay alguien que te hace sentir invisible por distintos motivos. Nadie está librado de eso, y está bueno en cierto modo, sin ensañamiento, que te pase, porque son las experiencias de vida que te hacen fuerte, que te enseñan. Lo bueno sería que luego de recibir lo que sea que te haya pasado, poder decir con una mano en la corazón ‘bueno, yo soy éste’, sin convertirte en una mala persona. Pero en la adolescencia es más difícil poder hacer eso, uno no sabe bien cómo defenderse”, dijo.
