Fede Bal suele ser reacio a mostrar su intimidad. Desde que se fue a vivir solo, su casa se convirtió en una especie de búnker. Se trata de un sitio en el que sólo ingresan sus íntimos e incluso trata de que no salgan demasiadas fotos del interior. “No le muestro a nadie mi casa, porque para mí es un lugar íntimo para estar en este momento”, comentó en una charla con Vero Lozano en Cortá por Lozano.
En el medio de la entrevista se permitieron una recorrida por la propiedad y allí se pudo observar el lujo y las condiciones en las que vive Fede. Entre lo más llamativo, el mini bar que hizo construir en honor a su papá, Santiago Bal. “Yo le dije a mi carpintero que quería un bar como si fuera para mi viejo, porque ahora se acostumbra mucho espejo y neón”.
Entre las comodidades tiene seis baños, seis habitaciones (una destinada a juguetes y peluches de sus series animadas preferidas) y un gimnasio al aire libre que sólo está techado, el bar mencionado, que fue bautizado “Barbieri Bar”, entre otros tantos ambientes. En el exterior, un gran jardín en el que está emplazada la famosa pileta que generó una de las últimas peleas entre El Polaco y Barby Silenzi.
Por otra parte hizo referencia a la decoración de la casa. Durante un tiempo vivió en ese lugar con su mamá, Carmen Barbieri. Ella fue parte del estilo que adoptó y nunca abandonó. “Mamá dejó muchas cosas acá porque venimos de muchas casas, somos de mudarnos mucho. Encontramos esta casa, mamá la compró y yo me ocupé de ponerla bien”.
Para finalizar reveló un dato desconocido y que hace mucho más armoniosa la vivienda. “Antes vivía acá la familia de Luis Alberto Spinetta, así que hay como un amor que sobrevuela la casa y hay mucho arte”, comentó Bal.
