Ángel de Brito y Beto Casella, dos de los conductores más exitosos de la televisión argentina, están dando sus primeros pasos en un relativamente nuevo medio de comunicación: el streaming.
En diálogo con Revista GENTE, se animan a conversar juntos sobre su relación, atravesada por la competencia y lucha de egos de su profesión. Una supuesta enemistad que en realidad dio lugar a un vínculo de colegas más que cercanos.
Al hablar sobre los primeros pasos para sumarse al canal de streaming Bondi, donde cada uno tiene su propio programa, los conductores revelan que suelen reunirse por fuera de lo laboral: “Somos amigos de la vida. Nos hemos juntado a tomar cafecito y charlar de la nada misma. Incluso mucho antes del proyecto de streaming. Olga era una señora del barrio en ese entonces”, bromea Beto.
-¿Por qué de afuera uno piensa que compiten y es imposible que se junten a tomar algo?
-Beto: Me parece que, en el fondo, un poquito nos cagamos de risa de eso. A veces hasta nos mensajeamos en pleno programa. Cosa que por ahí no se si es muy común en la tele de hoy, donde vos querés verlo muerto a otro y que si te enterás que tiene dengue te ponés feliz.
Incluso el conductor de Bendita remarca las veces en que, cuando LAM era emitido por la mañana, él salía como móvil: “Era una especie de entrevistado permanente. Me divertía hacer los móviles. Nuestra buena onda no iba a cambiar porque empezamos a coincidir en el mismo horario. Y por suerte nos va bien a los dos, así que mejor todavía”.
Consultados sobre el contenido de los mensajes que se mandan mientras cada uno conduce su programa, los dos se miran y ríen. “No, imposible de publicar”, dice, picante, Ángel; a lo que Beto bromea: “Le mando ‘¿qué estás haciendo?’ a las tres de la mañana”.
Un poco más serios, explican como su vínculo se profundiza en torno a lo laboral: “Somos bichos de la tele, vemos los productos, qué le mide al otro, qué funciona, no medir solamente el rating, qué te garpa. Tenemos cosas en común. Son programas parecidos y muy distintos. El panel es un juego que nos gusta a los dos y nos divierte”, reflexiona Ángel.
-Antes de que LAM y Bendita compitan en horario, ¿miraban el programa del otro? ¿Y ahora?
-Ángel: Sí, yo lo miro actualmente, en diferido. Me encanta la tele.
-Beto: Sí, sí, Ángel es más obsesivo de la tele. Quiere saber todo lo que pasa y me comenta cosas del programa que honestamente me sorprende, como los graph. Yo veía LAM, los tenía en un monitor de la radio a la mañana. Ahora veo más las cosas que salen en las redes, fragmentos.
-¿Qué opinas Beto de las angelitas y qué opinas Ángel del panel de Bendita?
-Ángel: A Any Ventura la adoro, trabajé con ella en la radio hace 20 años. Con Alejandra Maglietti trabajé en todos los realitys "ando", Bailando, Cantando, Patinando, todos esos. Y con las demás no me tocó trabajar. Pero me llevo bien. Hemos tenido algún cruce alguna vez, pero mínimo, un chasqui boom al lado de peleas reales. Siempre hubo buena onda porque, además, cuando yo estaba a la mañana y Beto a la noche era un ida y vuelta, lo que pasaba en LAM salía en Bendita, al otro día levantábamos alguna cosa que habían dicho en Bendita. Le hacíamos nota a Beto, a las chicas, era una dinámica que se fue dando, no fue buscada, pero se fue dando.
-Beto: Hay un perfil de angelita que tiene que contenerlo todo. Para ellos es importante: información, pero la que no maneja un celular con mucha información, tiene que manejar personalidad, te tiene que dejar un par de títulos. A veces levantarte un portal, o tiene que manejar hacer picante un debate que se está poniendo frío en el piso. A mí me parece que cuando Ángel y la producción de LAM llaman a una chica, hay como un casting de 'si no tiene todo esto no sé si entra'. El perfil de las chicas, son muy fuertes de carácter todas, muy picantes, lo cual está perfecto, porque hay que estar todos los días 2 horas al aire, generar contenido. Hoy la tele te demanda la atención permanente.
Ángel y Beto, dos estilos diferentes de conducción, pero con el mismo desafío
Beto con 64 años y Ángel con 47 son parte de dos generaciones diferentes de periodistas y conductores, pero diariamente se enfrentan al mismo reto: encabezar un programa de entretenimiento.
-Tienen una tarea difícil ustedes, en general todos los días, que es entretener a la gente sobre todo en un contexto social bastante complicado, ¿qué piensan de eso?
-Beto: Tuve un dilema con ese tema. Cuando explota lo peor de la pandemia, acuérdense que los noticieros eran muerte-muerte, tantos muertos en tal país, el encierro... era el monotema, no se hablaba de otra cosa, ni fútbol, ni la economía ni nada. Y me acuerdo de haber tenido una charla de producción sobre si seguir la línea de los noticieros, o nos animamos a entretener, con el riesgo de que nos digan ‘que se está muriendo la gente y estos tipos hacen un informe sobre la novia de Tinelli’. Y fuimos probando, temiendo una reacción en contra, y fue al revés, mensajes que llegaban: 'gracias por permitirme respirar un ratito a la noche de tanta mala onda'. Y es al día de hoy que, por la calle, en las redes, te dicen: ‘Loco ustedes en pandemia fueron una compañía bárbara’.
-Ángel: Yo creo que nos buscan por eso también, porque la gente está harta de ver noticias malas todo el día y a la noche quiere divertirse. Con cosas que pasan en el mundo del espectáculo, con los informes de Bendita que son más amplios tal vez, se meten en otros temas también. En LAM nos pasó al revés. Fuimos del mundo del espectáculo a cubrir lo que estaba pasando, las cosas del día a día. Hicimos un año y pico de casi no hacer espectáculo para enfocarnos en actualidad.
Dialogando sobre los cambios en el periodismo y los estilos de cada uno, desde la generación de Beto Casella a la de Ángel de Brito, los dos conductores reflexionan sobre sus cambios personales que les permitieron llegar donde están hoy.
“Tanto Ángel como yo y cada persona que nos ve cada noche va evolucionando a nivel personal. No sos el mismo a los 20, a los 30, a los 40 y así... si tenés la suerte, el culo, de evolucionar junto con los cambios de la tele y en algún caso vos estar a veces un pasito adelante de la evolución y marcar algún cambio, sos un bendecido y te vas a poder mantener en los medios”, expresa Beto, luego de más de 40 años en los medios.
Ángel por su parte, reflexiona sobre la transición que le tocó vivir en estos 20 años de profesión: “Cuando empecé no había internet así que imaginate todo lo que cambió. Yo llegué a esa camada de vivir sin internet. No había whatsapp, no se podía googlear, no podías buscar un archivo por Youtube. Me parece que los que sobrevivieron como decía Beto a la adaptación son los que se fueron aggiornando. La esencia es esa: trabajar todos los días, tratar de no perder las ganas de ir a trabajar todos los días”.
La pregunta que siempre quisieron hacerse Beto y Ángel mutuamente
-Beto, ¿cuál es la pregunta que siempre quisiste hacerle a Ángel?. Y Ángel, ¿cuál es la pregunta que siempre quisiste hacerle a Beto?
Las risas y miradas cruzadas no tardan en aparecer. Los dos conductores se conocen hace muchos años y conocen muchos de los secretos del otro, que lejos están de aparecer en la pantalla o en el aire de la radio.
-Beto: No la pensé… mmm, ¿Cuál es la persona que más detestas en este ambiente? No se lo preguntaría al aire, ni quiero que la conteste ahora. Vos me pediste la pregunta, no dijiste que tenga que contestar.
-¿Queres responder Ángel?
Ángel: No. Me la guardo, no quiero darle prensa. Y mi pregunta… Beto salió con una angelita mía, una relación de público conocimiento: Marixa Balli. ¿Saliste con otra de las angelitas, de las ciento y pico que pasaron por LAM?
En medio de risas, Beto responde: “Nunca una relación tan profunda como lo de Marixa”. “Yo estuve con...”, recuerda mientras hace mímicas de hacer cuentas: “3 compañeras de Bendita y 2 angelitas, pero no es que me meto en el ámbito de trabajo, no es que hago una cosa genital en el camarín. No. Me vinculo, siempre son vínculos lindos. Pequeños romances”.
La primera vez de streaming de Ángel de Brito y Beto Casella
Aunque con el paso de los días, desde el inicio del canal Bondi a fines de abril, los conductores comenzaron a hacer su camino en esta nueva plataforma, se animaron a reflexionar sobre esta nueva experiencia laboral.
“Es como cuando fuimos a primer grado, la primera vez. Como cuando arrancas cualquier cosa, tiene un sabor divino de lo impredecible, porque uno además ha empezado programas de tele, programas de radio y más o menos sabía a qué atenerse. Esto es un terreno absolutamente incierto. Acá no hay veteranos, no hay Héctor Larrea ni Carrizo ni Tinelli, somos todos debutantes. Los que ya están en la cancha, los que estamos saliendo y esto es lo lindo también, debut en todo. Así que es a descubrir. Estamos como chicos a ver qué pasa en la escuela”, expresa Beto.
Por su parte, Ángel también se muestra con muchas ansias de compartir espacio con Beto: “No trabajamos nunca juntos. Nos conocemos hace muchos años. Nuestros programas en la tele fueron primos en algún momento, hoy competencia, pero siempre nos llevamos bien y somos vecinos, yo con Ángel Responde y él con Onda Beto. Cada uno va con un estilo muy definido, muy marcado. En mi caso muy distinto a la tele, a lo que ven en LAM particularmente. Porque obviamente todo el mundo me tiene muy asociado al mundo del espectáculo o al jurado del Bailando. Acá saco más mi faceta radial pero en streaming, más entrevistas, más columnistas, más entretenimiento, hablando de todos los temas”.
Fotos: Christian Beliera
Entrevista: Juan Abraham y Tomás Bodean
Contenido para redes: Luna Figliuolo
