En horas de la tarde, Santiago del Moro había adelantado que ingresaría a la casa de Gran Hermano (Telefe) una mujer. Aunque no quiso revelar más detalles, cuando comenzó la gala se supo que se trataba de Catalina Gorostidi, una de las jugadoras más polémicas de esta edición.
La ex participante apareció con un elegante look de vestido rojo con mangas largas y muy producida para su reencuentro con sus compañeros. Y aunque probablemente quería tomar partido tras la intensa pelea de Emmanuel y Furia, no pudo hacerlo, ya que ingresó en un 'congelados'.
Cata es la tercera eliminada de esta temporada que participa en un congelados: antes pasaron Agostina y Licha. En este caso, le tocó llevar una valija con un explosivo sobre de Gran Hermano. "Lleva una bomba. El que agarre el sobre quedará eliminado de inmediato... Porque si sos familiar o amigo, estás eliminado. Si no lo sos, tu familiar o amigo queda eliminado ¿Cuando? En el acto", reveló Del Moro sobre lo que indicaba el comunicado.
Además, la producción le dio un marcador para que pudiera escribir una frase en alguno de los espejos de la famosa casa. "El comunicado dejalo en una zona neutral de la casa. No lo dejes a nadie en particular. No podés hablar, solo alguna sonrisa o alguna palabrita", fueron las indicaciones puntuales del conductor a la ex furiosa.
Así fue la vuelta de Cata a la casa de Gran Hermano
Después que sonó el timbre del 'congelados' y todos quedaron paralizados, la médico primero metió una mano dejando ver sus guantes rojos, hasta que hizo su entrada triunfal muy a su estilo.
"Hola Gran Hermano ¿Cómo estás? Te vine a pelear un ratito, o no... Gracias, por dejarme entrar a tu casa otra vez. Veo que hay muchos invitados, no me esperaban", dijo mientras caminaba rumbo a su reencuentro con los jugadores.
Mientras iba paseándose por el living saludó a algunos de sus ex compañeros, le tocó el hombro a otros como a Emmanuel y se dirigió puntualmente a Zoe diciéndole: "Hola mi amor", luego de que la rubia hace días dijera a cámaras que la extrañaba.
Más adelante, Cata les dejó saber: "Los veo todos los días y saben lo mejor de todo? Que los extraño un montón aunque no lo crean.... Me vine a quedar ¡no mentira! Ni en sus sueños cariño", bromeó.
Siguiendo las instrucciones del conductor, la ex jugadora ubicó el sobre cerca del box de la casa y les aclaró: "No tengo ni idea de qué es". Antes de irse, dejó escrito en uno de los espejos un mensaje irónico: "Se cayeron las caretas?", les puso.
Además, aprovechó el momento de su regreso para hacer tres reclamos puntuales: preguntó quién estaba usando su cama, pidió que el confesionario tenga su foto en la puerta y quiso saber qué pasó con 'la cariños' tras encontrarla fracturada. "Que alguien me explique qué carajos le pasó en la cabeza? Me destruye verla así", dijo preocupada.
Después que Cata salió de la casa todos salieron corriendo a agarrar el sobre pero fue Furia quien lo logró, aunque no se esperaba la mala noticia que venía después. Pasada la medianoche, Juliana finalmente pudo leer el comunicado y Gran Hermano le indicó que si amiga Rocío, tenía que abandonar la casa de inmediato. Cuando le preguntó si podía armarle la valija, el dueño de la casa respondió: "No, después".