De paso por Miami y a pocas semanas de su alta epidemiológica por covid, la China Suárez (29) continúa compartiendo con sus casi cinco millones de seguidores en Instagram sus días de playa, los operativos para ocuparse de Magnolia y Amancio –aunque viajó en compañía de su madre, Marcela Riveiro, quien la está ayudando– y sus tiempos de ocio.
La figura de Multitalent Agency, que viajó a la ciudad de la Florida para cumplir con el shooting de una campaña publicitaria mientras Benjamín Vicuña comparte tiempo con Benicio, Beltrán y Bautista en Buenos Aires, aprovecha también para ver amigos, rendirle tributo a su adorada Sofía Sarkany y comer en lugares exclusivos.
Fue en el Faena Hotel, ubicado en Miami Beach y situado frente al Océano, donde la actriz de Argentina, tierra de amor y venganza disfrutó hace unos días de un mediodía soñado. Su paso por el hotel que es propiedad de Alan Faena quedó registrado en una serie de postales que compartió en Instagram stories.
Además de mostrar detalles de la majestuosa pileta al aire libre, rodeada de sombrillas en blanco y rojo, la China fotografió a su primera hija con el actor chileno. Post almuerzo, la actriz eligió eternizar a Magnolia con un look "royal".
Con un largo y fresco vestido blanco, Magnolia posó descalza sobre unas venecitas que forman una corona real y que se encuentran en las inmediaciones de la pileta del hotel. Con el pelo recogido y con servilletas en mano, la pequeña posó como una mini instagrammer.
El Faena, que cuenta con 58 habitaciones y 111 suites decoradas en rojo y turquesa que ofrecen vista al océnano, está rodeado de arte. En las vistas exteriores del hotel, en el Mammoth Garden, se exhibe Gone but not Forgotten (2014), de Damien Hirst. Se trata de una escultura fabricada a partir del esqueleto de un mamut de tres metros y recubierto de oro ante la que la China no dejó de fotografiarse con Magnolia.
