El pasado 12 de enero, el famoso musical Matilda regresó a los escenarios porteños, llenando de magia el Teatro Gran Rex durante la temporada de verano. Es por eso que GENTE fue invitada a ser parte del increíble backstage y conoció detalles únicos de la obra basada en la novela homónima de Roald Dahl.
Quienes nos abrieron las puertas tres horas antes del inicio del espectáculo fueron sus protagonistas. Ellos, en medio de los preparativos, contaron detalles de sus personajes, explicaron cómo se preparan función tras función para dejarlo todo sobre el escenario y cuáles son los desafíos que se les presentaron a lo largo de los ensayos.
Si bien en el musical participan reconocidas figuras del espectáculo argentino como Laurita Fernández, en el papel de la Señorita Miel; Agustín "Soy Rada" Aristarán, como Tronchatoro; y José María Listorti, como el padre de Matilda; las verdaderas estrellas son niños de entre 9 y 11 años con un talento descomunal.
Los pequeños, que son divididos en tres grupos por función, son actores, bailarines y cantantes que dan vida a todos los que son parte de la nueva escuela a la que asiste el personaje de Matilda. En esta aventura cada uno tiene la posibilidad de mostrar su increíble preparación artística y hasta se animan a participar con el público en distintas oportunidades.
En diálogo con algunos de los padres de los niños, los mismos explican que muchos pasan entre 4 y 5 horas entre bastidores para presenciar la preparación de sus hijos, más las dos horas y media que dura el show. Es así que organizan sus vidas para ver felices a sus hijos haciendo lo que más aman en el mundo.
Laurita Fernández habló de su experiencia interpretando a la Señorita Miel
Laurita Fernández, una de las protagonistas de esta puesta en escena, compartió sus impresiones y vivencias con GENTE y destacó lo desafiante que fue esta obra de teatro en la que implicó más canto que baile.
"Estamos disfrutando de cada función y cada día al máximo. Porque ya quedan las últimas tres semanas de esta magia y de este impresionante espectáculo", comenzó contando la actriz, quien en la obra tiene el papel de la querida Señorita Miel.
Además, Laurita, conocida por su destreza en el baile, reveló su amor por el teatro musical desde pequeña y cómo este género le requirió una gran dedicación y esfuerzo extra.
"Para mí era era un desafío vocal y un desafío actoral muy grande. Tiene una línea de canto muy lírica, que si bien yo me vengo preparando hace mucho para eso, nunca lo había hecho en escena todavía. Entonces, bueno, era volver a explorar ese área que me gusta mucho, pero que quizás no había explotado tanto en otros trabajos".
"Todo está puesto para que el espectador disfrute y sienta que vive una experiencia más allá de ver sólo un espectáculo. Y creo que pasa algo muy increíble, que es que todos los grandes que la vivimos, estemos en la platea o en el escenario, nos sentimos niños por un rato y entramos como en ese juego que es muy hermoso volver a vivir”, reveló la conductora.
“La Señorita Miel que me tocó interpretar tiene canciones muy hermosas y tiene una conexión con los chicos muy hermosa también y a mí me da el placer de poder disfrutar con cada uno de los grupos”, aseguró sobre su conexión con los más de 30 niños que trabajan con ella semana a semana.
Uno de los momentos más lúdicos de la obra es durante la canción Sé que al crecer, donde el elenco y el público participan lanzando avioncitos de papel. Laurita describió este momento como algo muy único que conecta a todos con la infancia y el juego y que a ella la motivó mucho más a formar parte de esta hermosa obra teatral.
Soy Rada y un musical en familia
A las 18 comienzan a maquillar a Agustín Aristarán, quien después de muchas horas sentado sale a escena con el cuerpo y la voz aterradora de la malvada Tronchatoro, a quien a su forma logró darle un tinte humorístico que atrapa a los espectadores.
Sin embargo, lo más lindo para el actor es poder estar haciendo esta obra junto a su pareja, Fernanda Metilli, y su hija de 17 años, Bianca.
"Son muchas horas de pre armado, una hora y media en total, pero me hace poner súper feliz. Disfruto mucho estar con todo este equipo, son muchos niños talentosos que me pone contento, pero el hacerlo con mi hija y mi pareja, es una felicidad que no tiene nombre", comenzó explicando emocionado.
Agustín, quien vio la misma obra en los Estados Unidos explica que la producción nacional está sin lugar a dudas al mismo nivel que espectáculos de Broadway.
"Es un hecho histórico esta obra, es sin dudas mi obra favorita, más allá de que éste yo siendo parte, es una gran apuesta para cualquiera que lo ve de afuera. No tiene nada que envidiarle a nada. Lo de Argentina es un nivel muy alto y esta es una de las demostraciones”, aseguró.
En cuanto a la malvada villana que cobra vida función tras función precisó: “Mi personaje fue todo un desafío, la máscara, un género diferente, un cuerpo diferente y encima que sea un personaje icónico hace que haya mucha expectativa puesta en este personaje”.
“A la peli la miré en su momento y también la vi mucho con mi hija. Con quien nos damos consejos, críticas, ella es muy crítica conmigo y eso me encanta. Yo la aliento a mi hija a que elija el camino que siente que la va a hacer feliz, hoy es actuación y si mañana es la abogacía, también", sostuvo.
Y cerró: "No quiero que Bianca sea lo que a mí me gusta que sea. Quiero que encuentre su camino en lo que le guste. Está en una gran edad así que cualquiera sea el camino, tanto con su mamá y yo, vamos a estar para ella para extenderle la mano”.
Fotos y video: Catalina Recalde
