El príncipe Louis, el hijo menor de William y Kate, se ganó el cariño y la atención del público al mostrar su personalidad espontánea y curiosa durante la ceremonia de coronación de Carlos III, celebrada este sábado en la Abadía de Westminster y posteriormente en el Palacio de Buckingham.
El pequeño no pudo contener su emoción durante el evento y se mostró como un infante más del mundo travieso, cansado y en algunas oportunidades hasta molestando al resto de sus parientes de la realeza que debían mantener la compostura para no lanzar una carcajada con sus ocurrencias.
Algunos de los momentos que quedaron televisados del príncipe Louis y que luego fueron viralizados en redes sociales, fueron gestos de burlas, gritos de alegría e incluso bostesos de aburrimiento y sueño cuando la jornada se volvió más pesada para su corta edad.
El príncipe Louis siempre ha destacado por su comportamiento espontáneo y curioso, lo que ha generado un sinfín de titulares en los últimos años. Desde su aparición en el balcón de Palacio en el Trooping the Colour en 2019, el pequeño ha demostrado ser el miembro más querido y desinhibido de la Familia Real Británica. Con solo cinco años de edad, el príncipe Louis se ha convertido en uno de los grandes protagonistas de la coronación de Carlos III, que fue seguida por más de 100 millones de personas en todo el mundo.
La diferencia de edad con su hermana mayor, la princesa Charlotte, se notó debido a que la niña de ocho años siguió todas las normas de comportamiendo como una verdadera lady e incluso llegó a pedirle a su hermano que se comporte un tanto enojada. En los festejos de coronación lució preciosa un vestido con capa de color blanco creado por el diseñador Alexander McQueen.
