Este sábado a la noche, Wanda Nara (34) y el delantero del Paris Saint Germain, Mauro Icardi (27), fueron víctimas de un robo en su domicilio de Neuilly-sur-Seine.
Afortunadamente, el hecho ocurrió cuando la pareja y sus hijos –Valentino (12), Constantino (10), Benedicto (8), Francesca (6) e Isabella (4)– estaban fuera de la residencia, y fue el personal el que se dio cuenta que varios objetos no estaban y que otros estaban fuera de lugar.
En la casa –que por estos días ya no se siente tan segura– hay varios ambientes. Y su entrada, en blanco y con una araña que cuelga justo delante de un gran espejo, es, sin dudas, uno de los sectores más fotografiados.

Por otra parte, Nara e Icardi también tienen un amplio comedor con vista a los jardines, un living con chimenea, una cocina con mesadas de mármol blanco, un enorme vestidor de zapatos y carteras, y varios baños y cuartos.













Pero eso no es todo. La casa también poseé un gimnasio, un sauna y una inmensa pileta cubierta rodeada de columnas grecorromanas.


