Bill Gates anunció esta semana su separación de su esposa, Melinda Gates, tras 27 años de casados. Durante estas casi tres década los Gates construyeron uno de los imperios tecnológicos más grandes del mundo: Microsoft.
Con la noticia del divorcio, cientos de personas se preguntaron automáticamente cómo será la millonaria división de bienes que la pareja deberá llevar a cabo. Uno de los puntos de mayor curiosidad es saber qué pasará con la lujosa mansión que ambos comparten.
La mansión que se ubica a orillas del lago Washington, en Seattle tiene un valor aproximado de 150 millones de dólares. El lujoso inmueble es conocido como Xanadu 2.0. Su nombre hace referencia a la película de Orson Welles, 'Ciudadano Kane'.
El terreno fue comprado en 1988 por dos millones y costó siete años y una inversión de 63 millones de dólares para que se encontrara en las condiciones que tanto Bill como Melinda añoraban. Fue diseñada por James Cutler Architects y Bohlin Cywinski Jackson.
Se extiende en sus 6200 cuadrados y para su construcción se utilizaron medio millón de tablas de madera de pino Abeto Douglas de 500 años y un total de 300 obreros, 100 de los cuales fueron electricistas para que esta propiedad también fuera un centro tecnológico.
La mansión de Bill y Melinda Gates tiene 7 dormitorios, 6 cocinas, 24 baños, 10 de ellos completos, una piscina, gimnasio, sauna para baños de vapor, salas de estar, una enorme biblioteca y un comedor para recibir hasta a 200 invitados. Cuenta con un cine privado con capacidad para 20 personas y una cochera con espacio para 23 automóviles.
De acuerdo con la revista Forbes, la fortuna del empresario está valuada en 130 mil millones de dólares, muchos de los cuales corresponden a las múltiples propiedades que han adquirido ambos a lo largo de las casi tres décadas.