Hoy instalados en Miami, Sofía Bonelli y Claudio Paul Caniggia consolidan su amor. Después de 30 años de matrimonio con Mariana Nannis, en 2019 el ex jugador de la Selección Argentina volvía a creer en el amor.
Por entonces, 4 años años y medio después de conocer a la modelo con un título de traductorado de ingles se embarcaba en una nueva historia de amor que enseguida, en un exponencial salto cualitativo, pasó a convivencia. El primer tiempo bajo el mismo techo se dio en el hotel Faena de Puerto Madero.
Hace dos años, según prometieron, iban a casarse en Henderson, pero hasta el momento no lo concretaron. Eso sí, se comprometieron en un ritual ecológico en el que "limpiaron las malas energías".
Consultados recientemente sobre la posibilidad de dar el Sí, quiero que quedó en suspenso, Bonelli respondió desde Miami: "Sí, claro. La idea sigue firme aunque todavía no tenemos fecha". Respecto a su vínculo actual contó: "Estamos enamorados y somos muy compañeros. ¡Estamos muy bien!".
Según contaron tienen pensado quedarse varios meses más en la Florida. Además, reveló Bonelli, ambos vacunados con la Pfizer, continúan disfrutando siempre con "cuidados" de la vida de ocio mientras Claudio se enfoca en "proyectos relacionados al fútbol".
"Está muy interesado en encontrar un lugar en la MLS (Major League Soccer), que es la principal liga de futbol de Estados Unidos y Canada, integrada por 27 equipos", señaló en diálogo con GENTE.
Cómo fue su ritual en Tulum en el que "limpiaron energías"
En noviembre de 2019 se comprometieron en un ritual en Tulum, más precisamente en el hotel un lugar de ensueño en el que reinan la armonía con la selva maya y el mar Caribe y en el que su habitación de hotel salió 7000 dólares la noche.
Por ese entonces, Bonelli le contaba a GENTE: “Con Claudio estamos muy enamorados. Cuando termine de arreglar el tema legal con su ex nos vamos a casar. Nos gustaría hacerlo en Henderson (provincia de Buenos Aires), el pueblo donde él nació. Muchas personas me escriben mensajes y me piden por El Yayi, como lo llaman en su ciudad, y me agradecen que ya no siga con su ex, porque ella lo alejó de su gente".
La pareja optó por una ceremonia que "limpia" las malas vibras y festejó su unión rodeada de amigos íntimos. El lugar que eligieron para la especial ocasión no tiene electricidad y busca cuidar el medio ambiente, por eso ambos celebraron su historia de amor de una forma eco-friendly.
"La ceremonia maya que elegimos incluye el intercambio de alianzas; es un ritual sagrado con música. Yo voy a llevar una corona de flores, vamos a estar descalzos, y no podemos llevar celulares", anticipaba Sofía.
Bonelli y Caniggia hicieron el rito del "copal". En esa ceremonia, un incienso hecho con resinas naturales usadas ancestralmente ahuyentó "el humo negro", como se suele llamar a las malas energías.
Claudio estuvo vestido en black and white por Yves Saint Laurent y Sofia lució un vestido de la diseñadora neoyorquina Nicholas K.
“Estuvimos 45 minutos descalzos frente a la chamán y nos juramos amor. En el momento en que Claudio me tenía que dar el anillo, nos dimos cuenta de que se había olvidado las alianzas de la diseñadora Alice Waese en el cuarto. Pero la ceremonia continuó y después bajamos a la orilla del mar para dejar nuestras ofrendas. Más tarde nos fuimos a comer sushi al resto Tsenja y cuando regresamos a la habitación con Claudio intercambiamos las alianzas en una ceremonia aun mas intima”, cerró la novia por aquel entonces.
Sus primeras fotos durante su convivencia en el hotel Faena de Puerto Madero
Fotos: Archivo Grupo Atlántida.
