La incursión de los famosos en política no es un tema nuevo. Sin embargo, cuando se trata de personajes ultra mediáticos, que viven exponiendo sus vidas, ideas y posturas a través de redes y medios de comunicación tradicionales, esto suele llamar más la atención. Meses después de haber contado que un partido político la había convocado para sumarla a sus filas, Cinthia Fernández (32) -panelista de Los Ángeles de la Mañana (El Trece)- confirmó que será candidata.
Apenas terminó el colegio empezó a estudiar Marketing. Aunque aseguró que le iba muy bien, dejó la carrera para dedicarse a lo que más le gusta: actuar y bailar. Es súper mediática desde entonces, más aun desde que Ángel de Brito la sumó como panelista a su programa.
“Voy a ser candidata a diputada provincial por Buenos Aires este año”, sentenció Cinthia luego de hablar en el programa sobre la separación de Barbi Silenzi y El Polaco. Recordó que la propuesta no es nueva, sino que pasaron unos meses desde que le propusieron esa idea. "Les dije que lo iba a pensar. Entiendo que no tengo una formación política, pero hay mucha gente en la política que tampoco la tiene y está ahí por ser familiar de alguien", sentenció, lanzando su primer dardo como candidata.
La ex de Matías Defederico contó que se sintió muy libre de sumarse a Unite, el partido que llevó al congreso a Amalia Granata. "Me dieron muchísimas libertades y me dijeron que puedo seguir trabajando en televisión. En mi caso, me quiero abocar a las cuestiones de familia, más que nada al tema de la Ley de Adopción y demás. Yo sé que la política es integral y se abordan todos los temas, pero mi enfoque es ése", detalló en medio del programa.
Expresó que a diferencia de su colega, que comenzó su recorrido en la política con el objetivo de defender la vida, ella no tiene esa mirada. Es más, se paró en la vereda opuesta. "Estoy a la favor del aborto, lo contrario que Granata dentro del mismo partido, pero tengo libertad de pensamiento, nadie me va a prohibir lo que siento. Me banco cualquier crítica. Nunca me importó lo que digan los demás y me banco, mi problema es sentir una falta de respeto por no estar preparada en materia política", expresó en el tono confrontativo que la caracteriza.
Adelantó que es consciente de lo que implica entrar a la política tanto desde el ser blanco de críticas como de la necesidad de formarse y el tiempo que implica. Confesó que quizás es el puntapié inicial para estudiar una carrera que siempre la intrigó pero tiene postergada: Ciencias Políticas.