Tras renunciar a la monarquía en abril de 2020, el príncipe Harry no ha hecho más que declararle la guerra a la Casa de Windsor con críticas filosas y revelaciones sobre su verdad, entre ellas, la acusaciones de racismo que enervaron a la hoy fallecida reina Isabel II.
Tras abandonar sus funciones como miembro activo de la corona británica, los lazos del hijo menor del rey Carlos III y Lady Di con la familia real están completamente rotos. Pero eso no es todo: inició una serie de demandas en las que involucra a familiares y hasta instituciones gubernamentales de su país, en pro de regular claroscuros respecto a temas económicos y de seguridad.
Harry protagoniza seis demandas. En una de ellas acusó a su hermano William, príncipe de Gales, de complotar con los medios británicos un acuerdo económico. De hecho, en la coronación de su padre, quedó en evidencia que los hermanos no tienen la mejor relación.
Sobre esa línea, se conoció que el Duque de Sussex se encuentra en serios problemas tras haber perdido la primera demanda que efectuó contra el Ministerio de Interior de su país, lo cual deja un gris panorama frente a las restantes demandas en curso.
La primera batalla perdida de Harry: la seguridad
Respecto al juicio que inició contra el Ministerio de Interior británico, Harry perdió su derecho a seguir haciendo uso del grupo policial que lo protegía cada vez que llegaba a Inglaterra y cuyo reclamo dio lugar a la demanda tras perder este privilegio al renunciar a la Corona. Ahora, el esposo de Meghan Markle deberá costear su propia seguridad privada.
A su vez, de acuerdo a lo revelado por la revista Vanitatis, el Duque de Sussex podría enfrentar una factura de 18,5 millones de euros por los cinco juicios restantes que se prevé que perderá también.
Las acusaciones que complicarían al príncipe Harry
Algunas de las demandas de Harry fueron dirigidas a la prensa británica, y otra fue directo a la empresa que es dueña del The Mail on Sunday, a quien acusó de ser el responsable del aborto espontáneo que sufriera su esposa Meghan Markle en junio de 2020 a causa de estrés.
Bajo ese marco, el motivo de los procesos judiciales tiene que ver con piratería telefónica por parte de los medios y supuestos acuerdos con el Palacio de Buckingham a sus espaldas, en los que estaría involucrado su hermano William.
Estos reveses judiciales se suman a los rumores de divorcio con la madre de sus adorados hijos, Archie y Lilibet, a quienes perdería de hacerse efectiva la separación.
Qué pasaría con los hijos de Harry y Meghan si se divorcian
Muchos dicen que el divorcio de los Duques de Sussex es inminente. Hay quienes aseguran que el príncipe Harry se aferra a una sola cosa para evitarlo o posponerlo: sus hijos.
Según el experto en realeza Paul Burrell, el príncipe Harry siempre quiso ser padre, por lo que estaría evitando el divorcio, ya que, para él sería “prematuro” separarse de sus hijos Archie y Lilibet.
“Creo que él querría quedarse (...) para ver crecer a sus hijos. Porque si deja esta relación ahora perdería a sus hijos, porque ella los mantendría en Estados Unidos y él no los vería”, declaró Burrel.
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