“No seas como los demás” lanza Charly García en Rompela, la primera canción de La Lógica del Escorpión, su nuevo disco en el que habla de la lucha entre razón e instinto, y esgrime su visión sobre la era digital que vivimos y a la que a los 72 años también se le impone con arte y haciendo que las redes le aten los cordones, como tanto le gusta decir a él.
Que una leyenda como él elija lanzar siete mil unidades numeradas en vinilo de su décimo cuarto disco solista (casi agotadas) no sólo es un gesto old school o “fuera de las métricas”, lo dice todo: también es posible detener el scroll y volver a las emociones. Lo había advertido: “Tampoco sé si hay tanta gente que tenga tanto amor por la música como el que tengo yo”.
Su amor/odio con lo digital, que en El Club de los 27 menciona como “un mundo traicionero” aparece en varios pasajes de esta fábula en la que no sólo se autocelebra (como se merece, por otra parte) sino en la despliega toda su intuición casi sobrenatural. También reaparece su sarcasmo cuando proclama: “Freud lo ha arruinado todo como internet”.
El sucesor de Random (2017) incluye canciones inéditas, nuevas versiones de temas propios y de clásicos, y colaboraciones de ilustres colegas: Fito Páez (“Rock and Roll Star”), David Lebón (“El club de los 27” y “La Medicina n°9”), y Pedro Aznar (“América”), más la voz del recordado Spinetta, que Charly conservaba en un viejo casette (“La Pelicana y el Androide”).
Mientras “lidera los charts en todos los formatos”, como hizo saber Sony, su casa disquera, el álbum no sólo marca un nuevo capítulo en la carrera del músico, sino que está cargado de referencias, guiños y secretos fuera de serie.
Los secretos de la grabación de La Lógica del Escorpión a los que pudo acceder GENTE:
- A muchos de los instrumentos los llamó cariñosamente con apodos, un detalle muy único que “humanizó” su relación con guitarras y teclados.
- Charly grabó algunos de los temas con la “guitarra química”, un obsequio que le hicieron Nacho Gardonio y Sebastián Lista y que Carca probó especialmente “para darle el visto bueno antes de su uso”.
- Como todo buen escorpión, además de ser gran protector de los suyos, mantuvo intacta su capacidad para leer las intenciones en el estudio, con conexiones casi telepáticas, como contó Pedro Aznar.
- En las paredes del estudio Happy Together (Caballito), en el que grabaron durante un año, le leía “Charly no quiere que se filtre nada”.
- “La decisión absoluta de cómo se escucha cada tema, que con auriculares pasa caprichosamente de un canal al otro, es total capricho de Charly”, nos contó el team SNM.
- Dueño de todas sus decisiones sonoras como productor, suele decirle a sus músicos que “finalmente la tecnología no lo alcanzó” (y no debió ser al revés). Algo que está volcado en la arquitectura a lo Charly: las voces se destacan especialmente por su crudeza.
La referencia cinematográfica del marco conceptual
El disco está lleno de guiños a su legado musical y a filmes como Mr Arkadin (1995). Al igual que la película, bucea las complejidades del comportamiento humano y la naturaleza a menudo destructiva de nuestros impulsos. En una escena, Arkadin expone la fábula de la rana y el escorpión, un relato que resuena en García en medio del confinamiento por la pandemia en 2020.
El escorpión, incapaz de ir en contra de su instinto, pica a la rana que lo está ayudando a cruzar el río, condenándolos a ambos. De manera similar, el álbum de Charly explora la lucha entre el instinto y la razón, el destino y la elección personal, utilizando la fábula como un marco conceptual.
Tributos a la Obra de García, las colaboraciones con figuras clave y las autoreferencias
Se incluyen Juan Represión, que había quedado afuera de la edición original de Pequeñas Anécdotas de las Instituciones (Sui Generis, 1974) y Te recuerdo invierno, tema que escribió en su adolescencia. Su capacidad de revisitar y reinventar su propio material lo trae a las nuevas generaciones que eligen sentir que el “rock no murió”.
La participación de músicos como David Lebón y Pedro Aznar, quienes han sido parte integral de la carrera de Charly en diferentes etapas, subraya la importancia de las relaciones musicales en su evolución artística. Estas colaboraciones no son meras anécdotas, sino que crean un puente entre el presente musical de García y el legado que ha construido con estos artistas a lo largo de los años.
En la versión de La pelicana y el androide, que cuenta con la voz de Luis Alberto Spinetta, Charly también hace un guiño a “No me verás en el subte”, su canción incluida en Cómo conseguir chicas. Las intertexualidades son varias a lo largo del álbum. Mientras La medicina Nº9 contiene la melodía de Rap de las hormigas, canción incluida en Parte de la religión, Charly referencia también su propia obra en Estrella al caer, donde aparece la melodía de Chipi Chipi.
Por su parte, además de referenciar a Imagine, de John Lennon (en la canción que le da título al disco), homenajea a los Beatles en La medicina Nº9 y en Rock and Roll Star (The Byrds), el tema que cierra un álbum de colección en el que no deja que la leyenda que es lo limite ni lo encorsete.
Arte de portada: Silvana Cordano.
Fotos: Nora Lezano y Guido Adler.
