El actor estadounidense habló de la muerte de su ex pareja, de cómo la está transitando su hijo y de la decisión de convivir con Nickayla Rivera.
En los últimos días, Ryan Keith Dorsey (37) se vio envuelto en un escándalo cuando se dio a conocer la noticia de que estaba conviviendo con Nickayla (26), la hermana menor de Naya Rivera (1987-2020), la actriz que falleció ahogada en el Lago Piru.
De inmediato, los medios comenzaron a decir que entre ellos había surgido una relación amorosa, mostrando una foto de ellos tomados de la mano como prueba. La primera en hablar fue ella, quien aseguró: “No me preocupa cómo se ven las cosas”. Anoche quedó claro que a él sí...
Utilizando su cuenta de Instagram con ciento cincuenta mil seguidores, el actor –que no publicaba nada desde julio, cuando encontraron a Naya sin vida– contó que Josey (5) "creció muy rápido y sin su madre", que cuando le pregunta dónde está Naya, él le responde que "es un ángel ahora y está con Dios en el cielo". Palabras que provocan que el niño, con inocencia, le diga: "Bueno, quiero ir ahí. ¿Cómo llego?". Y que espera que un padre nunca tenga que escuchar esas cosas de sus hijos...
Después contó por qué Nickayla, su cuñada, se mudó con ellos diciendo: "No puedo creer que esto sea la vida real y que estoy a punto de hablar de estas tonterías. Mi hijo preguntó si TiTi podía vivir con nosotros, me dijo 'Quiero que TiTi viva con nosotros, para siempre', porque ahora ella es lo más parecido que tiene a una mamá. Y ella, en un acto de amor, no dudó ni un segundo en aceptar la propuesta y dejar su vida en pausa. Es una situación temporal. Después de todo lo que tuvo que pasar, ¿cómo podríamos negarle eso?”.
"Ni siquiera iba a hablar de nada de esto. Siento que mi cabeza está llena de tantas cosas que lo último que necesito es esta mierda", comentó Ryan y aclaró que a él no le importa lo que la gente piense sobre la situación, "porque es 2020 y así es la vida. 2020, qué año de mierda". Después dijo que va a necesitar toda la ayuda que pueda obtener como padre soltero que está tratando de construir su carrera y sobrellevar este desastre con su hijo, y que lleva manejándolo "cada hora de todos los días durante más de 80 días".