A través de sus redes sociales, Mariana Copland contó una historia que jamás había salido de ella. Una de las versiones más crudas y reales de cómo era Diego Armando Maradona. Es que según ella, el astro del fútbol “le salvó la vida”.
Hace poco compartió una imagen de Diego en su Instagram y escribió: “Gracias. Gracias en nombre de mi mamá, de mi hija, mío. Toda mi vida voy a agradecerte. Toda mi vida voy a decirte 'gracias'”.
Se conocieron en una clínica de rehabilitación. Diego la apodó “Lapicera Veloz” y ella no pudo evitar agradecerle frente al mundo al ídolo futbolístico más grande de la historia.
Con respecto a su relación con Maradona contó: “Era un compañero más. No tenía trato privilegiado, comía con todos, desayunaba con todos. Llevaba la vida de una persona que estaba intentando recuperarse. Pero no pasaba desapercibido. Tenía una personalidad demoledora”.
Lo que la marcó sin duda alguna fue la única actividad física que podían hacer, que era jugar al voley. Aunque ella prefería escribir o dibujar. Un día Maradona le dijo: “¿No pensás mover el orto? ¿No vas a gritar un gol conmigo? Loca, te tenés que mover, no podés estar todo el día ahí echada”.
Luego, en el hilo de Twitter continuó con otro momento icónico que vivió con Maradona. “Un día desaté una crisis horrible. Y entre tres enfermeros, para calmar la angustia, me ataron a la cama de un primer piso y me dieron una sobredosis de midax. Al otro día me levanté con la mitad del cuerpo paralizado. Era un ente. Babeaba. No podía caminar. Tenía dormida la mitad de mi cuerpo. A los tres días, los mismos tres enfermeros vinieron a por mí por una nueva crisis”, contó la joven y agregó:
“Pero Diego se paró adelante, abrió los dos brazos, me hizo casita y dijo: ‘Con la nena no’. Discutieron varios minutos, yo lloraba. Hasta que pidió que le trajeran el teléfono para conectar a la ficha del SUM donde todos compartíamos los días. Entonces me pidió el número de mi mamá y la llamó. Y cuando mamá, harta del dolor de saberme internada, lo atendió, él dijo: ‘Señora, soy Diego, la nena está bien. Sí, tranquila, pero mejor que no pase la noche acá”.
Según constató Infobae en diálogo con Mariana, Maradona no se despegó de ella. Era su protegida. En el relato viral de la joven, narra que él le repitió a su madre que se quedara tranquila, que ella “podría ser mi hija”.
Por último, la joven remató el hilo con una anécdota magistral. Sin dudas, Diego metía goles hasta fuera de la cancha y mientras se estaba rehabilitando.
“Vos, Lapicera Veloz, pasame una hoja”, le dijo Maradona. “Como sabía que mi crisis había sido desatada por un novio que me dejó, escribió: ‘Nicolás sos un pelele’. Y me miró después de firmar y me dijo: ‘No seas cagona, dáselo’”, recordó Mariana.
Ella además aprovechó la anécdota para mandarle un mensaje muy directo a su ex pareja. “Nicolás, si leés esto, siempre fuiste un pelotudo, pero hasta que Maradona no me lo explicó no lo entendí y me costó eso, ocho años al lado tuyo”, concluyó.
