Pasaron casi seis meses desde que Jorge Lanata ingresó al Hospital Italiano para hacerse un estudio programado, y tras una complicación quedó internado. Desde entonces, su esposa, Elba Marcovecchio y sus hijas, Bárbara y Lola Lanata, lo acompañan, así como su círculo más íntimo.
Este jueves, la esposa del periodista habló en un móvil con LAM (América TV), y cuando Ángel de Brito le preguntó cómo se sentía, se quedó muda. Después de un silencio y suspiros, confesó: "Qué difícil decir cómo estoy. No sé qué contestarte. Me dejaste sin palabras... Estoy con una mezcla de angustia, esperanza y fe. Quizás es muy profundo para esta hora, pero hay momentos donde es muy difícil sentir. Yo prefiero enfocarme en los chicos y el trabajo", comenzó diciendo sobre sus emociones durante este proceso.
Ante la consulta sobre el estado de salud de Lanata, destacó : “Jorge es un gladiador, la está peleando, es increíble la batalla que está dando. A mí me llena de orgullo. No te voy a negar que tengo miedo, pero el miedo es una mezcla de angustia y ansiedad de no saber dónde estás parado... Ya van seis meses, y cada día en terapia no cuenta a favor", expresó notablemente emocionada.
Asimismo, explicó sobre la recuperación del conductor: "El estado de Jorge es oscilante. Eso hace que a la noche no duerma. Yo lo extraño, quiero verlo en la rehabilitación, en casa. Es difícil ver a alguien tan fuerte y protector como Jorge, vulnerable. Es durísimo un hospital".
Elba Marcovecchio reveló cómo son las rutinas con Jorge Lanata internado
Luego de pasar por múltiples operaciones, tanto Elba como las hijas del periodista se mostraron optimistas con el avance que iba teniendo, fue así como contaron que podían hablar con él y que estaba mucho más presente.
En la charla, Marcovecchio revelo: "Le hablo, le pongo música clásica porque le encanta... Le cuento cosas. Le conté sobre la condena a Cristina, pero prefiero no decir cómo reaccionó... También le cuento de mi día a día. Porque vos más que nadie lo sabes Ángel, que a Jorge le encantan los chismes”, agregó con humor.
Finalmente, detalló: “Él está en terapia y es un día a día. Jorge tiene muchas cositas chiquititas que están ahí dando vueltas. La realidad es que si él estuviera bien, ya estaríamos programando el traslado. Algunas noches tuve que ir porque me preocupé, pero gracias a Dios no pasó nada grave", dijo.
