Las idas y vueltas fueron una constante en la relación de Miley Cyrus y Liam Hemsworth. En diciembre de 2018 se casaron y todo parecía marchar bien, pero nueve meses después llegó la separación.
“No pasé demasiado tiempo llorando por todo esto y no fue porque fuera fría o estuviera tratando de evadir algo, fue solo porque no podía cambiar nada”, reveló la cantante en noviembre del año pasado durante una entrevista.
A cuatro años de haber lanzado “Malibu”, Miley recordó la significativa canción con una publicación en sus redes sociales. “Una canción sobre un lugar y una persona que en su momento amé mucho”, escribió en la descripción del video donde se la ve cantando en su estudio casero.
“Ese amor fue correspondido más allá de lo que podría describir aquí con libertad y escapismo. Perdí ese hogar junto con muchos otros en 2018”, acotó sincera.
A nivel profesional, el 2020 fue un año positivo para Cyrus ya que lanzó su disco "Plastic Hearts" donde versionó grandes clásicos como “Heart of Glass”, de Blondie, “Zombie”, de The Cranberries, y las emblemáticas “We Will Rock You” y “Don´t Stop me Now” de Queen.
Además, tuvo importantes colaboraciones como Billy Idol, Joan Jett y Dua Lipa, quien participó en el tema “Prisoner”. “Midnight Sky”, con cierta inspiración en la música disco, fue el primer sencillo de su nueva y actual era.
Miley viene de pasar momento duros ya que, más allá de su divorcio de Hemsworth, un incendio había destruido su casa en 2018. Ese mismo año también tuvo que posponer toda la grabación de su disco por una operación en las cuerdas vocales tras una amigdalitis que le impedía cantar.
La intervención la llevó a realizar un fuerte cambio de hábitos para continuar en la música: debió permanecer un lugar periodo sin decir absolutamente nada. Según declaraciones que brindó en la revista Variety, esa situación le sirvió como una especie de terapia para alcanzar la madurez profesional y personal.