Mauro Dalessio se convirtió en el último eliminado de Gran Hermano luego de atravesar 11 semanas en las cuales le pasó de todo. Apenas ingresó captó la atención de Juliana "Furia" Scaglione, la protagonista de esta temporada, con quien tuvo un breve e intenso romance que terminó en un gran escándalo.
Tras su eliminación, el joven de 27 años relató cómo fue su paso por el reality más visto del país, las contradicciones que enfrenta entre el "personaje que muestra" y la persona que verdaderamente es. Más allá de su imagen de hombre fuerte y potente, asegura: "Tengo miedo a que me lastimen".
Mauro Dalessio: por qué entró a Gran Hermano y qué aprendió dentro de la casa
—¿Por qué motivo entraste a Gran Hermano?
—Mi objetivo principal era vivir una experiencia nueva e inolvidable. Estuve cerca de quedar en el año 2022, de hecho se viralizó mi casting. Me gustaba todo esto y quería tener una aventura así. Igual, podría decir que todas las cosas que hice me fueron bastante bien, pero necesitaba vivir algo nuevo. Lo rutinario me aburre un poco.
—¿Qué te dio la casa en estas semanas?
—Me ayudó a conocerme mucho más a mí mismo. Aprendí a ser más paciente en muchos aspectos. También pude abrirme mucho más públicamente. Muchas veces lloré porque traía cosas de afuera. Más allá de que al principio me mostré como un canchero y que hablo hasta por los codos, soy una persona muy sensible. Siento mucho las cosas y soy muy respetuoso. Esas dos cosas no van de la mano con lo que mostré al principio. Por eso desde afuera no me creían nada. Eso fue algo que luché mucho en mi vida para que no me pase y me sigue pasando...
El enfrentamiento con Furia que lo dejó fuera de Gran Hermano
—¿Cómo fueron estos primeros días fuera de Gran Hermano?
—Estoy recién salido... La verdad es que tenía ganas de quedarme un rato más... Creo que podría haberlo hecho si no hubiera tenido este conflicto de haberme enfrentado a la jugadora más fuerte de este certamen...
—La enamoraste y te enfrentaste...
—No sé si la enamoré. No estoy tan seguro, eh. Creo que estuve bien con mi papel. Básicamente lo que yo quería era demostrar que estuve con ella porque me gustó y porque me gustaba. No fue ni por estrategia ni fue por juego. Eso se lo dije siempre a Furia en la cara. Yo siempre planteé que por qué ella no tiene derecho de estar con alguien que le gusta dentro de la casa sin prejuicios de mis compañeros o de ella.
-¿Ella qué creía?
-Furia pensaba que estaba con ella por estrategia. Es un prejuicio muy grave que hay. Todos piensan que si estás o hablás con ella es para colgarse de su popularidad. Yo creo que no es tan así. De mi parte mostré un lado muy genuino. Fue por eso que estuve muy dolido durante muchos días. Muchas veces aguanté cosas pensando que eran chiste y otras veces confronté con ella. Fue un sube y baja hasta que después pasó lo que pasó.
—¿Eras consciente de que ese enfrentamiento podía eliminarte del reality?
—Realmente no era algo que me preguntaba o preocupaba. Me di cuenta que perdí algo muy importante dentro de la casa porque ella era una contención y la quería mucho. Es muy difícil por momentos. Estamos completamente aislados y no sabemos nada. Yo siempre pensé en que tengo que estar bien de la cabeza yo para estar lo mejor posible. Mi personaje fue cambiando desde que llegué a la casa hasta que me mostré como realmente era. En ese momento no lo pensé, me guié por lo que sentía.
-¿Por qué te fuiste?
-En la última semana ya sabía que era una gran posibilidad irme. Hice lo que pude, pero me dejaron muy solo dentro de la casa. Respecto al juego está bien, pero me dejaron solo porque era una manera de no confrontar con Furia.
—¿Cómo fue el último fin de semana ahí?
—Los últimos dos días ya estaba entregado. Sabía lo que se venía... Esos días intenté estar tranquilo y no discutir con nadie. Quería disfrutar porque ya lo sentía...
Cómo era la vida de Mauro Dalessio antes de Gran Hermano y a qué se quiere dedicar
—¿Qué hiciste cuando terminaste el colegio?
—Repetí un año porque era muy quilombero y en quinto año de secundaria me llevé todas las materias. Terminé la secundaria a los 21 años... En esa época creía que me las sabía todas y me golpeé la cabeza varias veces. Después empecé la facultad y cambié por completo: empecé a estudiar y metí 10 materias en un año. Terminé la carrera de marketing y me puse a laburar con eso.
—¿Te gustaría volver a ese tipo de trabajo?
—Primero tengo que ver bien cómo termina siendo todo esto. Igual, me gustaría ser actor... Me gustaría estudiar, pero siento que soy bastante espontáneo para hacer eso. No me cuesta ni tengo vergüenza. Me encantaría...
La exigente relación con sus papás y la sensación con la que convive
—¿Cómo es la relación con tu mamá? Cuando entró al congelado se te vio muy emocionado
—Soy una persona que se emociona mucho con esas cosas. Mi vieja me quiere mucho y hay un montón de cosas que no sabe o que se las toma muy personal. Por ejemplo, cuando le dije que iba a entrar a Gran Hermano primero se enojo y recién a la hora me dijo que me bancaba. Yo le avisé cuando había quedado y estaba confirmado. Mi viejo me bancó desde el primer momento.
—¿Ellos siguen juntos?
—No, se separaron cuando yo tenía 17 años. Lo sufrí bastante porque desde que era chicho había vivido muchas discusiones en mi casa. Me acuerdo que cuando tenía 6 años les pregunté por qué no se separaban... Fui mucho tiempo al psicólogo. Fue duro, pero sé que ellos hicieron lo mejor que pudieron. Nadie te enseña a ser padre y realmente desearon lo mejor para mí desde el primer día. Me exigieron muchas cosas y es por eso que yo tengo una sensación de sentirme muy insuficiente.
—¿En qué cosas te exigían?
—Cuando empecé a ir al colegio me hacían la tarea porque querían que tenga todo 10. Cuando se dieron cuenta que no iba a ser así... Ellos querían que sea ingeniero y no pasó. Choqué un poco y tuve muchas discusiones por eso. Poco a poco me fueron aceptando en lo que yo quería. Ojo, siempre me respetaron igual porque siempre fui responsable. Terminé el colegio y me puse a trabajar, estudiar, ir al gimnasio y no me gustaba tener novia.
—¿Viviste con ellos hasta que entraste a Gran Hermano?
—No, me mudé a los 22 años. Ahí tuve que aprender a cocinar y a hacer las cosas de la casa…
Mauro Dalessio habló de la imagen que da y por qué no es de tener novias
—¿En qué te ayudó tu rutina física?
—Es algo que me ayudó un montón a enderezarme en un montón de hábitos. Estoy súper contento de haber podido empezar con el entrenamiento. Gané mucha fuerza mental. Antes era mucho más caprichoso... Ahora cocino y como de todo.
—¡Estás para ir a MasterChef!
—¡Sí! Quiero conocer a Martitegui. Me coparía estar en un reality con él porque me va a cagar a pedos o me va a decir: "Esto es incomible, flaco". Yo quiero escuchar esto... A Betular también me gustaría conocerlo. Fui muchas veces a su local y me encanta.
—Tanto en tu presentación como en esta charla contaste que no te gusta estar de novio.
—La realidad es que cuando empecé la facultad me enamoré muchísimo. La chica estaba en pareja y dejó a su novio para estar conmigo. Lo que pasó después de un tiempo de noviazgo, es que ella se había quedado con el personaje que yo mostraba y no con todo el otro Mauro que es más sensible, compañero y empático. Ella nunca me creyó que todo eso era genuino. Volvió con el ex y me dejó a mí. Quedé muy dolido y me quedo siempre con la sensación de que no soy suficiente para un montón de cosas.
—¿Por qué sentís que generás esa imagen y sos otra persona diferente?
—Porque me siento muy débil y tengo miedo de que me lastimen. Ese es un personaje que lamentablemente me ayuda. Yo igual en todas mis relaciones de cortar si hay algo que no me gusta. No voy nunca por atrás. La sinceridad es muy valorada, pero te hace confrontar porque todos quieren ser amigos de todos y más con las redes sociales.
Qué es lo que más le gusta de Furia y cómo imagina su relación a futuro
—¿Cómo fue cuando te empezó a gustar ella? Entraste cuando el programa ya había empezado...
—No había visto nunca el programa. Sólo entré a ver los nombres de los compañeros para no quedar mal cuando entrara.
—¿No tenías idea de Furia era la protagonista de esta temporada?
—¡No! En mi vida personal estoy muy activo y no lo había visto mucho. Fue por eso que en muchas cosas del juego estuve muy en pelotas.
—¿Qué fue lo que te gustó de Furia cuando la conociste?
—A mí me gustan las personas intensas. En el tiempo que estuvimos juntos no fuimos una pareja estereotipo de Gran Hermano que se la pasan tirados en la cama hablando boludeces. Cuando estuvimos bien estábamos más pila. Después tuvimos muchas discusiones subidas de tono. Yo permití un montón de cosas. Quise entender por todos los medios cómo era ella. En un momento se hizo insostenible pero más por cuestiones suyas que mías.
—¿Lograste entenderla?
—No, pero quiero dejar en claro que no me arrepiento de nada de lo que hice. Estoy completamente orgulloso de todo lo que hice en la casa. No cambiaría nada y, de hecho, estuve mil veces nominado porque era el blanco fácil.
—Y ahora Furia está nominada hasta el fin del juego
—La realidad es que no sé si fue una sanción. Creo que estuvo bien que la sancionen pero a ella no le cambia y sabe que tiene un montón de aguante.
—¿Creés que puede ser la ganadora?
—No sé si la ganadora... Creo que tiene posibilidades. Pueden pasar muchas cosas. Por ejemplo, pueden juntarse el resto de los fandoms de los otros jugadores contra ella solo para que ella no gane. A muchas personas les da igual quién gana, pero no quieren que sea Furia por las cosas que dice o hace.
—Hizo y dijo bastantes cosas polémicas, ¿volverías a estar con ella?
—Siento que es una gran persona, pero hay muchas cosas que la empañan. Tiene ataques de ira muy fuertes. Inhibe a un montón de personas porque genera miedo que te agreda. Intenté comprender un montón de cosas. Siento desilusión por un montón de cosas que nunca me creyó. No quiero hablar de eso porque me hace mal. Intenté un montón con ella sabiendo que estábamos haciendo un show, pero llegó demasiado lejos. Tiene un límite que no es el mismo para todos. Me refiero a que llego a hacer 1/8 de lo que hizo ella y me voy sin la valija. Ella tiene mucha más posibilidades de jugar que el resto.
—¿Te imaginás una relación afuera de Gran Hermano con ella?
—No, básicamente porque me lastimó mucho adentro de la casa. Ojo, en muchas cosas ella me ayudó mucho, pero hay un montón de cosas que no me gustan. Lo que pasó estuvo buenísimo. Tuvo sus altibajos, pero las bajadas fueron muy graves. En nuestra última charla le dije que teníamos que cambiar de página y listo. Yo hoy te digo que no volvería a estar con ella. Ella piensa que estoy actuando y que no soy genuino. Eso me duele una barbaridad. No me esperaba haber salido tan lastimado.
Agradecimiento de vestuario: Crowned
Fotos: Martina Cretella