Martín Bossi es el protagonista de la tapa digital de GENTE esta semana y habló sobre el amor y la posibilidad de tener hijos. Asegura que nunca sintió la necesidad de ser papá. "Nunca tuve ganas de formar una familia y en parte, es porque comprobé que fracasaron las instituciones como la monogamia y el matrimonio. La monogamia fracasó hace mucho tiempo y todos fingimos demencia. Esa es la realidad. Este cuento del amor para toda la vida es imposible y hay que decirlo", asegura el humorista.
Por otra parte, el humorista lanza una impactante frase: "Yo creo también que el amor romántico fue muy sobrevalorado a lo largo de la historia". Bossi se refiere, básicamente, al amor de pareja.
"Es una pena porque el amor tiene muchas otras formas: no sólo existe el amor de pareja. Yo tengo grandes amigos -como Claudio Salomone, Fede Hoppe, Diego Torres y podría seguir nombrándote a varios más- pero, si me ven de vacaciones con Fede Hoppe en la playa, dan por hecho que estamos en pareja. Sólo de esa forma “vende” el amor en los medios y ahí también hay un trabajo de deconstrucción para realizar, ¿eh?", asegura.
Martín Bossi: un pésimo estudiante de periodismo
El actor y humorista asegura que estudiar periodismo fue un gusto que le dió a sus padres. "Lo hice por ellos pero lo pasé mal: estudiar Psicología I y II no era para mi. De hecho, en ese momento, descubrí un grupo de teatro muy under que se llamaba “Che Guevara” y pasaba más tiempo ahí que en la facu. Pero sí, fui hasta tercer año de Periodismo y, como no me presentaba a rendir las materias, falsificaba las notas para que en casa creyeran que aprobaba y avanzaba en la carrera. Una locura total, no debería contar estas cosas", dice entre risas.
Sin embargo, aclara que le encanta estudiar. "A mi me encanta estudiar y lo sigo haciendo. Hoy a la mañana estudié 3 horas piano y ayer dos horas de danza, vivo tomando clases de teatro y me inscribo en talleres que me parecen interesantes pero es otra cosa: ahí lo que hago es seguir mi vocación entonces lo disfruto enormemente", concluye.