Luciano Castro (48), nominado a Mejor Actor en los Martín Fierro por su trabajo en El primero de nosotros (Telefe), le brindó una entrevista al programa Agarrate Catalina (La Once Diez). Si bien las novedades profesionales confirman que está en un gran momento laboral, en las últimas semanas también fue noticia por incipientes rumores de ruptura con Flor Vigna y también por juntarse con su exmujer, Sabrina Rojas, en el festejo de Esperanza, la hija de diez años que tienen en común.
“Lo único bueno que hice en mi vida son mis hijos. Y hasta eso me costó, así que lo disfruto el doble ahora”, arrancó contando a corazón abierto. Cuando le repreguntaron sobre su particular respuesta, él reveló algunas cuestiones de la dinámica familiar: “Es que mi egoísmo me llevó a pararme en lugares en los que, justamente, solo pensaba en mí. Y me perdí un montón de momentos y situaciones, cosa que a mí me parecía que estaba bien porque estaba haciendo mis cosas. Y no. Solo estaba pensando en mí. Ahora estoy mucho más con mis hijos".
Al mismo tiempo, tuvo una cariñosa observación para su exesposa y su rol como mamá. "No es algo menor, porque mis hijos no se crían solos. No son mis hijos, son nuestros hijos. Soy un afortunado, lo sé. Un día voy a ir caminando por la calle y se me va a caer un cartel en la cabeza, porque no puedo tener tanta suerte. Con Sabri supimos cómo separarnos después de doce años y no perdimos de vista que lo más importante son los chicos. No hay nada que nos mueva de ahí”, indicó con una sonrisa que acompañó sus palabras.
Luciano Castro y los rumores de ruptura con Flor Vigna
En los últimos meses muchos aseguraron que el amor entre Luciano Castro y Flor Vigna estaba atravesando una crisis. En esta entrevista, el actor decidió ponerle punto final a la situación diciendo: “Salvo que venga Flor y me cuente que estamos en crisis, no me entero. O que venga un muchacho notero que me pregunte, tampoco me entero".
Respecto a quienes opinaron sobre su relación con la cantante, él detalló: “No solo es que dicen por decir, sino que el mismo tema termina siendo tratado por diez personas distintas en canales distintos. Celebro que puedan decir lo que quieran, pero el límite siempre está cuando empezás a joder a terceros”.