Revelan cómo funciona el sistema sustentable en el que educan a sus hijas –Erin (6) y Regina (5)– “lejos del consumo”.
Con el correr del tiempo, Lola y Aarón –“informados y practicantes de esa cultura”– se han convertido en referentes del eco-lifestyle. Ambos coinciden en un mismo origen. “Crecí en un rancho en el que la comida que se llevaba a la mesa era de cosecha propia, y bebíamos agua de nuestro propio pozo termal”, cuenta Aarón. “Todo alimento que sobraba se convertía en composta”. Lola asiente. También creció tomando jugos de frutas de sus propios árboles y observando desde su ventana la huerta orgánica que luego replicó en la casa que hasta hace poco compartieron en Miami. “Usamos pantallas solares, diferenciamos los residuos, plantamos semillas, compramos envases de vidrio, vamos por el mundo quitando los sorbetes y no consumimos nada que pudiese contaminar”, relata. Pero no ha sido ése el único giro en el consumo familiar. Ponce se suma al camino de Meghan Markle, Julia Roberts y Emma Watson, entre otras figuras que hacen culto del fashion sustentable. Hoy, alineada al concepto del estudio de diseño Plant The Future –a través de la creadora cordobesa Paloma Treppa–, colabora y promociona con cápsulas de indumentaria biodegradable.
–¿Cómo hacen de la sustentabilidad una lección para sus hijas?
A: Tenemos la fortuna de que las firmas nos regalen sus colecciones. De este modo reutilizamos, no apilamos y nos limitamos a comprar estrictamente lo que se necesita.
L: El mundo nos pide reducción a gritos. ¡Reciclemos! La moda es la tercera industria más contaminante del planeta y las grandes marcas deberían ser las primeras en reconvertirla en sustentable. Lamentablemente, los intereses comerciales aún siguen siendo más poderosos que la conciencia ambiental. El fast fashion al que nos acostumbraron está pasado de moda. Hoy, lo “in” es el vintage, la ética y la conciencia ecológica. Estando en Italia descubrí el valor del archivo y el regreso a lo vintage como método de reciclado. En varias galas usé prendas de la Sartoria Tirelli, donde se ha confeccionado el vestuario de numerosísimos filmes mundiales. He usado vestidos diseñados para íconos como Sofía Loren y Brigitte Bardot. Es una experiencia única. El mismísimo Gianfranco Ferré (reconocido diseñador italiano fallecido en 2007) me ha regalado piezas de sus archivos que tal vez algún día usen mis hijas. Y sólo consumo ropa de “brands proplanet” que, con sus métodos de fabricación, colaboran a reducir el calentamiento global.
Mis hijas observan, aprenden. Charlamos sobre nuestro guardarropas concientizado que mencionaba Aarón. Ellas saben que con una simple elección fashionista podemos ayudar al mundo. Si lográs que incorporen este hábito, todo lo que siga siempre será bueno.
Tal es el compromiso de la pareja con el medio ambiente que ambos desarrollan hoy proyectos personales para divulgar conciencia respecto de su importancia. “Soy patrocinador de GoPro y trabajo con ellos en un ciclo multimedia con el que ligo dos pasiones: la naturaleza y los deportes extremos”, cuenta Aarón, co-worker de Dylan Efron, hermano de Zac. “A través de la lente que llevo adherida a mi cuerpo comparto las riquezas naturales de cada país visitado y el modo en que son honradas por sus culturas”. Por su parte, y después de diez años de haber sido imagen de la firma Ona Sáez, Lola vuelve a tomar la posta brindando no sólo su presencia gráfica, sino también su idiosincrasia. “Lanzaremos en el mercado americano, y próximamente a Latinoamérica, una línea cápsula de jeans que reduce el consumo de agua y materias primas saludables”, dice Ponce. “Un desafío que me hace feliz pregonar, y mucho más en mi país, esperanzada en
Fotos: Christian Beliera y álbum personal de AD y LP.
Agradecemos especialmente a Las Garzas por el gran marco para esta producción.
