En charla con GENTE, el instagramer más popular, elegido por Marcelo Tinelli para 'Cantando 2020' (eltrece), habla de su vida y cuenta que lidia con las agresiones que genera la exposición.
Se consagró en cuarentena haciendo “Vivos en Instagram” –frase que pasó a ser su “nueva bio”–, que llegaron a tener conectadas a más de 140 mil personas a altas horas de las madrugada, entre ellos el mismísimo Justin Bieber, quien una noche, aburrido y curioso, le escribió: “Un placer conocerte”. Pero Lizardo Ponce (23), que cuenta con un activo fandom y 1,2 M de seguidores, no es una personalidad nacida al calor de las redes.
Antes de que la gente lo convirtiera en influencer estudió Periodismo, se hizo de abajo en Córdoba –su ciudad natal– y fue elegido por Marcelo Tinelli (61) para hacer La previa del show de Bailando, pista en la que dice “haberse fogoneado”. Sin casette, el ahora participante de Cantando 2020 (eltrece), anfitrión de Cantardo (la previa del certamen en el Instagram de @eltrecetv) y panelista de Confrontados (Canal 9) reflexiona en profundidad sobre el lado B de la exposición y cómo es “lidiar con todo el hate” estando del otro lado del mostrador.
–Tenés muchos que te defienden y muchos detractores. ¿Pensaste en terapia para calmar esa angustia de la que hablás?
–Hice terapia cuando era más joven, a los 17, 18 años, y sí, seguramente retome con mi psicólogo, porque me es necesario charlar y hablar. Me duele detectar la maldad, no entiendo hasta qué punto llegarán. Yo cuando era chico utilizaba las redes de la misma forma y supongo que ya se van a dar cuenta.
–¿Qué tanta libertad y alienación suponen las redes para vos?
–Creo que hay mucha libertad pero pasan cosas que no podemos medir. Por eso me refugio tanto en gente que ya lo pasó. Por ejemplo, alguien que me acompañó y tuvo lindas palabras fue Jimena (Barón), quien vivió el hate en las redes. Por eso, además de guiarme en la interpretación de La Cobra y hacer facetime, fue muy generosa conmigo. También recibí palabras de aliento de amigos como Yanina (Latorre) y Martín Cirio, entre otros.
–¿Qué te recomendó Jimena, quien desapareció de las redes justamente por las críticas y ya pasó episodios de fobia?
–Charlé mucho con ella acerca de cómo lo vivía y tomé todo lo que me dijo. Me sentí abrazado con su consejo. Me dijo: "Enfocate en lo bueno". Pero pega fuerte y tuve días muy tristes, pero estoy metiéndole garra. Me prometí que el día que no lo disfrute más, me voy
–Hablando sobre los golpes recibidos, te recordaron viejos tuits tuyos en los que marcaron tu “gordofobia” (N.d.R.: referida a sus dichos de 2013 por el peso de Adele: ‘Adele nació embarazada’). Sé qué hiciste un descargo público y pediste perdón, ¿pero qué más evaluaste a partir de eso?
–Mi respuesta está en el descargo que hice y está bien que remarquen cosas que no se tienen que hacer más. Yo también me hubiera sumado a remarcarlo. Eso sí, a mí me han hecho lo mismo con mi cuerpo y con mi sexualidad… No aprendí nada con golpes, no necesitaba que me pegaran tan horrible. Tengo muy en claro qué clase de persona soy y cómo pude crecer, tener vínculos hermosos con quienes me conocen y saben como soy.
–¿Cómo te pegó la devolución de Nacha Guevara en tu debut?
–Nunca me enojé con ella y no me metí con las limitaciones, ni esperaba un diez. Obvio que la admiro y me daba vergüenza tener que estar cantando delante suyo, pero no le voy a permitir a nadie que diga que hago pavadas. Estudié, me preparé y produzco lo que hago. Lo que más me dolió fue ver la cara de preocupación de mis amigos y familiares en la tribuna virtual y que me tengan que ver tan angustiado sin poder abrazarme.
–¿Qué te dijo tu familia?
–Mi familia obvio que entendió que las palabras de Nacha eran para tomarlas en cuenta, pero mi papá me dijo que no pusiera en duda cuán generoso es mi corazón, ni en el escenario ni en la vida”.
–Habiendo trabajado del otro lado, sos consciente de que es un show.
–Claro, entiendo que es un juego y un reality. Pero ojalá sean así con todos los participantes. Porque lo que me cuestionaron a mí se lo celebraron a otros: por ejemplo: "Saliste de tu zona de confort". Me pregunto por qué no me alentaron.
–¿Sentís que hay una rivalidad entre la gente de la tele con los contenidos generados en las redes, y viceversa?
–Yo en las redes encontré el lugar que la tele no me supo dar. Y la verdad, se asustan cuando aparecen figuras de las redes, porque la TV no nos reconoce a la gente joven. Me rompí el culo toda la cuarentena para generar todo ese contenido. Me gustaría que consiguieran todos los invitados como yo, desde el living de su casa: entrevistas con Sebastián Yatrá, Jimena (Barón), Oriana (Sabatini), Danna Paola, Tini…
–Volviendo al cyber-bullying, ¿en el colegio te sentiste discriminado?
–Con el tiempo fui aprendiendo a no adjudicarme el bullyng, porque siempre hay gente que lo pasó peor. Pero ser gay en el colegio fue recibir todo el tiempo miradas y burlas puestas en uno, el cuchicheo, chistes e insultos y se sufre mucho. Hubo épocas en las que lo pasé muy mal. De tener que bloquear gestos, movimientos y actitudes para que no me señalaran. Creciendo me hice más fuerte.
–¿Cómo respondías a esas agresiones?
–Pude aprender… Pero como mecanismo de defensa muchas veces contesté de la misma forma. Recibís tantas cosas negativas y buscás responder lo peor.
–¿Cómo te acompañó o reaccionó tu familia?
–A los veintipico me costaba mucho hablar acerca de que era gay. Por eso, un día mi psicóloga me propuso llevar a mi familia a la sesión y contárselos ahí. Se lo tomaron bastante bien. Mi viejo me dijo: ‘Si para alguien esto es un tema, esa persona no merece estar en tu vida’”.
–¿Cómo te llevás con la idea de compartir tu vida privada en las redes?
–Ahora estoy soltero. Pero en su momento estuve cinco años de novio, mostraba libremente a mi compañero y nunca lo escondí. Sí respetaría, el día que tenga novio, cómo quiere que lo maneje, si prefiere que lo suba a Mejores amigos, por ejemplo. No tengo problemas en contar mi vida, mis cosas y lo que soy.