Lionel Messi (36) y Antonela Roccuzzo (35) se convirtieron durante los últimos años en un sinónimo de familia. Se conocieron en la preadolescencia, pero años más tarde comenzó su romance, que fue oficializado en el año 2010, previo al Mundial de Sudáfrica. La pareja decidió sellar su historia de amor el 30 de junio de 2017 en Rosario, en una súper fiesta con 260 invitados que se llevó a cabo en el Hotel Casino City Center.
La flamante pareja llegó al altar con muchísima emoción, acompañada por su hijo mayor –Thiago, que en ese entonces tenía sólo cuatro años-, quien fue el encargado de llevar las alianzas de oro. Ciro, de dos años, estuvo presente, pero al cuidado de sus tíos. Mateo, el más chiquito del clan Messi, nació un año después del casamiento.
El matrimonio decidió grabar para siempre este día tan importante mostrando por primera vez el tatuaje que se hicieron en sus dedos anulares. Los dos se tatuaron la fecha de su enlace en números romanos: XXX VI MMXVII.
Apenas llegaron al salón, el futbolista sorprendió a Antonela con un regalo muy romántico: había contratado a Abel Pintos para que les cante especialmente a ellos. El reconocido cantante, uno de los preferidos de Antonela, interpretó la canción preferida de Roccuzzo: Sin principio ni final.
“No quería lagrimear, porque sabía que si yo lo hacía, toda mi familia se iba a quebrar. Al lado estaba
mi mamá, y mi hijo Thiago en el banco. Pero no me pude contener. ¡Nunca imaginé que Leo me iba
a dar esa sorpresa! Era tanta la emoción que me quebré. Mi hijo me preguntaba: ‘¿Mamá, por qué llorás?’, y no sabía qué decirle…”, fue la confesión que Antonela le hizo a sus mejores amigas en la fiesta.
Los exclusivos invitados de la gran fiesta
Obviamente, el mega evento revolucionó la ciudad: se estima que al aeropuerto de Rosario llegaron casi 20 aviones privados. Dieron el "presente" Shakira y Gerard Piqué, Neymar, Luis Suárez y Sofía Balvi, Evangelina Anderson junto a su esposo, Martín Demichelis y Marcelo Tinelli, entre otras celebridades.
La famosa pareja estuvo en todos los detalles de la organización: Antonela se encargó de elegir la decoración, el catering, el DJ que hizo bailar a todos, la barra de tragos, la mesa dulce y los souvenirs que se entregaron al final de la celebración. El gran salón fue decorado de blanco -con centros de mesas con rosas en el mismo color- y las elegantes arañas antiguas de caireles le dieron un toque mágico al lugar.
La propuesta gastronómica se dividió entres pasos. De entrada se sirvieron quesos, fiambres y escabeches. Luego siguieron los platos calientes -sorrentinos, cazuelas vegetarianas y de carne- y, por último, sushi.
La fiesta duró hasta el amanecer. Entre cada segmento de baile se pudo disfrutar la música en vivo con dos shows que se destacaron: el grupo Rombai y un recital exclusivo de Karina La Princesita, quien estaba de novia, en ese momento, con Sergio "Kun" Agüero.
El look de Antonela Roccuzzo en su boda
La novia eligió un delicado vestido -modelo sirena- de la exclusiva firma española Rosa Clará. Antonela lució su silueta con un escote corazón y diseño de corte princesa pero, lo más llamativo de la prenda, fue la espalda bordada gracias a un trabajo artesanal que, según pudo averiguar revista GENTE, llevó 200 horas de confección.
Completó su atuendo con sandalias diseñadas especialmente por Ricky Sarkany. ¿El detalle inesperado? En la suela de los sofisticados zapatos estaban grabados los nombres de la pareja. Al otro día de la boda fue un detalle que no se dejó de mencionar.
En diálogo con GENTE, la diseñadora del vestido dijo: "Creo que la novia nos eligió por la calidad de los tejidos y la frescura de los diseños, nuestra mejor carta de presentación. Digamos que nuestras colecciones se ajustan a la perfección al gusto de mujeres como Anto, que buscan incorporar tendencias, elegancia y sofisticación a su look, sin renunciar a la comodidad".
Fotos: Archivo Grupo Atlántida
Búsqueda de archivo: Mónica Banyik