En vísperas del lanzamiento de Chromatic, su nuevo disco, Stefani Joanne Angelina Germanotta, como se llama realmente, relató la lucha contra sus demonios.
Luego de cuatro años de que publicara su último álbum, Lady Gaga (34) vuelve al terreno musical con Chromatic, disco que también le sirvió para pelear contra sus demonios internos, según afirmó durante una entrevista con la emisora Apple Music.
Gaga aseguró que a lo largo de este último trabajo se planteó dejar la bebida, una adicción hasta ahora desconocida para muchos fans de la artista.
“He estado coqueteando con la idea de abrazar un estilo de vida sobrio. Todavía no estoy en ese punto, pero lo pensé en varios momentos mientras grababa el álbum”, comentó.
“Es una opción que surgió mientras intentaba encontrar la forma de seguir trabajando a pesar del dolor físico que experimento constantemente”, explicó “No tomo ningún analgésico, porque no es saludable para mí”.
También dijo que su idea sobre renunciar al alcohol llegó mientras grababa una canción “911” que se centra en su experiencia con antipsicóticos, medicación que tomó durante un tiempo.
"Parte de mi proceso de recuperación se basa en pensar: 'bueno, puedo ser muy dura conmigo misma cada día por el hecho de que sigo bebiendo o puedo optar por ser feliz y apreciar que sigo viva y trabajando, y sentir que lo estoy haciendo bastante bien'. Estoy lo suficientemente bien. Soy imperfecta de una manera perfecta", afirmó la también ganadora de un Oscar a la mejor canción por “Shallow” de la película protagonizada por ella en 2018 Nace una estrella.
“Dejé de fumar. Fumaba todo el día mientras trabajaba en el disco. Cuando acabamos, simplemente lo dejé. Fue lo más extraño y bonito que pudo haber pasado. Esta música de verdad me curó".
Por ahora renunciar a la bebida no está en estos momentos dentro de sus prioridades porque sabe que de no conseguirlo podría caer de nuevo en el círculo de odiarse a sí misma.