Marcela Tauro viene atravesando momentos complicados. Uno de ellos fue su enfrentamiento con Lizy Tagliani. Lo cierto es que la periodista decidió ir a Rosario a conocer a Leda Bergonzi, una mujer que afirma tener dones milagrosos, y compartió su experiencia en Intrusos (América TV).
El martes, Marcela sorprendió al no presentarse en Intrusos, por lo que el miércoles decidió contar cuál fue el motivo de su ausencia. "Ayer viajé a Rosario porque Leda es una sanadora laica que se presenta los martes nada más. Una amiga, que es la tercera vez que va, me dijo de ir y fuimos", comenzó contando la panelista.
Entonces, reveló que el lugar estaba lleno de gente, que hay que sacar entrada pero no hay que pagar, sino para tener un orden. "Empieza con una misa, con tres sacerdotes. La misa era a las 10, habrá sido 11 y pico que llegó ella... La gente cuando la ve, me hace acordar a Gilda, porque enloquece, la rodean, corren, la abrazan, lloran", compartió.
"Yo fui a ver qué era, a mí me gusta saber cómo es una experiencia así, vivirla", expresó Marcela y Flor de la V le preguntó cómo fue su experiencia. Sin dudarlo, la panelista contó: "Maravillosa, la verdad es que a mí me sorprendió mucho. Ella después de la misa sube al escenario, canta y vos empezás a sentir un calor y empezás a llorar. Después baja y empieza a sanar a la gente, uno por uno. Yo fui a ver qué era lo que me pasaba, si era real lo que decían".
Entonces, le preguntaron por el momento en que Leda se acercó a ella, y Tauro compartió: "Yo estaba buscando la foto de Juan Cruz, mi hijo... A ella no le hablas. Vino y fue muy rápido, como una ráfaga, sintió algo porque yo no le llegué a mostrar la foto, me la puso en el pecho, ¿qué significa? Corazón... Me la puso en el pecho y ahí yo me caí".
"Sé que alguien me ayudó, me pusieron en el piso y ella siguió tocándome en el pecho, se ve que es donde más tenía angustia. Yo lloré muchísimo. Ella te deja acostada y siguió sanando, la gente se caía también", detalló lo vivido Tauro. Luego, confesó: "Yo sentí paz y vi como una película de mi vida, no sé cómo explicarlo. Sentís alegría, felicidad también".
Posteriormente, contó que la hija de su amiga, de 13 años, también vivió una experiencia impactante y reveló: "Quedó tirada, lloraba y no volvía. Vino el sacerdote y dijo 'déjenla, está con Jesús, ahora vuelve, que se tome su tiempo'. Después le preguntamos qué había visto y dice que vio naranja y felicidad. Es la segunda vez que le pasaba".
Por último, Marcela compartió: "Yo siempre digo, soy curiosa, me interesa... Lo que recomiendo es, si te hace bien, andá. Cuando estás mal, anda y fijate qué te pasa por el cuerpo en esa experiencia... Yo te digo, si alguien movió tanta gente es porque el don lo tiene, sino eso se cae solo".
